El EuroStoxx 50 ha resistido sobre los 4.200 puntos, que es la base del canal que viene acotando la consolidación durante los últimos tres meses, y desde ahí trata de rebotar nuevamente. De mantenimiento de este soporte depende que no se abra la puerta a un contexto potencialmente bajista que podría llevar al EuroStoxx 50 <:SX5P.ST:> a buscar los mínimos de marzo en torno a los 4.000 enteros. Eso supondría haber asistido a una corrección del 10% desde el último máximo que estableció en la resistencia horizontal y clave de los 4.415 puntos que, recuerden, es la que frenó las subidas tanto en el 2021 como en el 2022 y, de momento, este 2023. Operativamente, una caída a los 4.000 enteros sería una oportunidad magnífica para comprar bolsa europea.