Apenas cambios significativos en las bolsas europeas en un comienzo de semana que no aporta cambios analíticos relevantes desde el punto de vista técnico. Que a corto plazo haya tanta tranquilidad tras el último y fuerte rebote, que ha llevado al EuroStoxx 50 (SX5P.ST) a recuperar toda la caída que lo llevó de los 4.320 a los 3.980 puntos, es de todo menos un signo de debilidad y sigue invitando a no descartar la posibilidad de que se consume una subida que lleve a la principal referencia europea a marcar nuevos altos del año y a buscar los máximos del año pasado en torno a los 4.415 puntos. En el caso del Ibex 35 (IBEX.MC) sigo pendiente de ver si muestra a corto fortaleza y para ello debería batir los 9.300 puntos.