Pocas variaciones en la renta variable japonesa que se toma una pausa dentro de su situación alcista una vez que el Nikkei se ha situado sobre los máximos de los últimos tres años. Cualquier consolidación la veremos como una simple pausa a corto plazo hasta que alcance primeros objetivos que manejamos sobre los 27.200 puntos, con el objetivo final de vuelta a sus máximos históricos del año 1990 en los 39.000 puntos.
En el más corto plazo no habrá debilidad destacable mientras no pierda los 25.425 puntos. A estas alturas es más un mantener que comprar y esperaríamos a que concluya el actual tramo alcista y se produzca una corrección significativa del 38,2% de la serie de Fibonacci o de la mitad para buscar entrada.