Apenas cambios analíticos destacables en el ecuador de una sesión en el que las bolsas europeas siguen sin decidirse debatiéndose entre formar un rebote mayor o retomar las caídas. Por el momento, el alcance de los máximos que marcó el Eurostoxx 50 hace dos semanas, en la zona de resistencia de los 3.371-3.377 puntos, donde el pasado 24 de julio se abrió un hueco bajista, ha frenado el rebote de las últimas sesiones y ha provocado una consolidación que por el momento se mantiene del todo vigente.