El giro bajista que vimos en la última hora en Wall Street ha hecho mella en las bolas europeas y vuelve a reforzar nuestra idea de que no podremos confiar en alzas sostenibles en las bolsas del Viejo Continente hasta que al otro lado del Atlántico el S&P500 y el Dow Jones Industrial consigan batir resistencias que ayer, una vez más, volvieron a rechazar los ascensos, tales como son los 3.190-3.233 puntos en el S&P 500 y los 27.000 del Dow Jones Industrial.