Llama la atención la fortaleza de la biofarmacéutica Sanofi (SAN.PA). El shock que supuso la pandemia en febrero impidió que su curva de precios confirmara un amplio proceso de reestructuración alcista a plazos largos, pero después de una vertical caída ha protagonizado otra vertical subida hasta recuperar todo lo perdido.
Su cotización ha vuelto a presionar la resistencia que encuentra en el techo del movimiento lateral que desarrolla en los últimos años. A corto plazo retrocede posiciones en lo que es por el momento una merecida consolidación, pero su sorprendente fortaleza invita a vigilar su comportamiento.
Por el momento no recomendaríamos comprar, peor si se produce un retroceso hacia los 82 euros podría ser aprovechado para comprar en busca de confirmación del doble suelo planteado, lo que abriría la puerta a la consecución de nuevos máximos históricos y a la subida libre absoluta.