Situación de corto plazo:
El mercado europeo está muy tocado tal y como refleja el hecho de que el rebote de las últimas 25 sesiones simplemente ha servido para recuperar la caída que se formó el pasado 12 de marzo, lo que coincide en muchos casos con el ajuste del 38,20% de Fibonacci de toda la caída que se inició en los máximos del pasado 19 de febrero, que es una recuperación muy tibia desde el punto de vista técnico. Que llevemos 25 sesiones dentro del rango de fluctuación de una única jornada es de todo menos un signo de fortaleza y refuerza que estamos ante un rebote poco fiable y muy vulnerable.
En este sentido, consideramos que en cuanto Wall Street comience a encontrar dificultades para sostener el tremendo rebote que ha formado mucho nos tememos que las bolsas europeas no tardarán mucho a volver a su zona de mínimos del año. El rebote en los índices del Viejo Continente se verá muy probablemente cancelado en cuanto se pierdan soportes como son los 2.795 puntos del Eurostoxx 50 (SX5E.ST) o los 4.330 puntos del CAC 40 (PX1.PA) galo.
Situación tendencial:
La tendencia alcista que definía desde el año 2009 el EuroStoxx 50 Total Return (SX5T.ST), que es la versión mejorada del índice tradicional EuroStoxx 50 que contempla la reinversión de los dividendos que reparten periódicamente las empresas que forman parte del índice, se ha cancelado tras asistir a la pérdida de los 6.000 puntos, que eran los mínimos de diciembre de 2018. Es momento de ir aprovechando rebotes para obtener una liquidez que será muy necesaria y preciada para cuando detectemos un suelo y podamos recomponer la cartera con una visión de largo plazo.
Un rebote en las bolsas europeas no nos sorprende ya que se está formando tras alcanzarse entornos de soporte histórico en muchos índices, como los 8.150-8.200 puntos del DAX 30 alemán (mínimos en 8.250), donde se encuentra una antigua resistencia de muy largo plazo como son los son los máximos de la burbuja tecnológica del año 2000 y de la crisis financiera del año 2007-2008. Todo apunta a que este soporte será partido en dos en un próximo hachazo bajista ya que seguimos considerando que es muy difícil que hayamos visto un suelo más allá de algo temporal.
Si atendemos a la estructura de precios que vemos en los índices del Viejo Continente mucho nos tememos que aún no hemos visto lo peor. Por poner un ejemplo, el DAX 30 alemán todavía no ha alcanzado ni siquiera el objetivo de caída mínimo del patrón bajista en forma de doble techo que confirmó tras perder los 10.270 puntos y que aparece en los 7.700 puntos del índice germano.