Si alguien tiene alguna duda de que el mercado europea está muy tocado y duda sobre la fiabilidad del actual rebote, solamente tienen que analizar el rebote de las últimas 24 sesiones. Por ejemplo, si analizamos la evolución del FTSE MIB podemos ver como el selectivo transalpino ha necesitado 24 jornadas para recuperar la caída de la sesión del 12 de marzo y algo muy similar ocurre en la mayoría de bolsas europeas. Que se necesiten 24 sesiones para recuperar la caída de un día es de todo menos un signo de fortaleza y refuerza que estamos ante un rebote poco fiable y muy vulnerable.
En este sentido, consideramos que en cuanto Wall Street comience a encontrar dificultades para sostener el tremendo rebote que ha formado mucho nos tememos que las bolsas europeas no tardarán mucho a volver a su zona de mínimos del año. El rebote en los índices del Viejo Continente se verá muy probablemente cancelado en cuanto se pierdan soportes como son los 2.795 puntos del Eurostoxx 50 o los 4.330 puntos del CAC 40 galo.