A pesar de que el alcance de la zona de mínimos que marcó en el año 2016 el petróleo West Texas Intermediate (WBS0Y.160), que es uno de los tipos de petróleo más operados en los mercados financieros, ha frenado las caídas y provocado un rebote, mucho nos tememos que todavía no hemos visto un suelo. El rebote desde la zona de los 27 dólares lo vemos vulnerable y más fruto de la extrema sobreventa que del inicio de una subida sostenible. Es probable que antes de ver un suelo asistamos a otro latigazo bajista que podría buscar la zona de los 20 e incluso los 17 dólares, que son los mínimos del año 2001.