Las principales bolsas europeas están consiguiendo rebotar desde los mínimos que han marcado intradía, cotizando casi sin apenas cambios con respecto al cierre de ayer después de que a primera hora el Eurostoxx 50 llegara a caer un 3%. Esto es algo que nos indica que la presión vendedora ya está encontrando serias dificultades para seguir imponiéndose y podría estar advirtiéndonos del comienzo de un rebote que todavía ponemos en cuarentena y que debería servir para aliviar parte de la sobreventa existente a corto plazo.
Todavía consideramos precipitado hablar de un suelo definitivo en las caídas pero ya debería estar muy cerca después de que el Eurostoxx 50 (SX5E.ST) se haya aproximado a la zona de los 3.400 puntos y sobre todo si atendemos al futuro del mini S&P 500, que ha alcanzado niveles de 3.091 puntos, dentro de la franja de los 3.050-3.100 puntos, que es la que venimos insistiendo que es donde habría que comprar. En este sentido, no hay que olvidar que las caídas las vemos como una corrección dentro de la tendencia alcista de largo plazo, que muy probablemente se retome en cuanto concluya esta fase de ajuste y es por ello que son una oportunidad para comprar bolsa.