Toma cuerpo el pull back esperado
Situación de corto plazo:
Las caídas que vimos ayer no nos sorprenden puesto que ya advertíamos a lo largo de las últimas sesiones que antes de ver una continuidad alcista no era para nada descartable la posibilidad de asistir a una consolidación que podría llevar al S&P 500 a formar un clásico pull back o vuelta atrás a la antigua zona de resistencia creciente, ahora soporte, que discurre ahora por los 3.060-3.090 puntos.
Después de este eventual pull back todo apunta a que la tendencia alcista se volverá a imponer y aún no podemos descartar un rally de Navidad. Este rally perdería muchos enteros si las caídas de corto plazo llevan al S&P 500 (SP500.CH) a perder la zona de soporte de los 3.060 puntos, algo que abriría la puerta a una consolidación más amplia, tal y como dibujamos en el chart adjunto. Esta consolidación no alteraría la tendencia principal alcista mientras no profundizara por debajo de los 2.855 puntos, que son los mínimos de octubre y el origen del último tramo alcista, que es el que se está consolidando o ajustando al otro lado del Atlántico.
Situación tendencial:
Los mínimos establecidos la última semana del año pasado en los índices norteamericanos, tales como son los 5.895 puntos del Nasdaq 100 (NDX100.NQ), los 21.712 del Dow Jones Industrial (DJI.NY) y los 2.346 del S&P 500, han sido un suelo y el origen de la reanudación de la tendencia que desarrolla el mercado estadounidense a largo plazo. Mientras estos mínimos de Navidad no se pierdan la tendencia principal o de largo plazo se mantendrá alcista, máxime tras conseguir los principales índices estadounidenses batir resistencias que los vuelven a situar en subida libre absoluta, lo cual permite que dejen atrás la consolidación que iniciaron a comienzos de 2018 y retomen la tendencia alcista que nació el año 2009.
