Situación de corto plazo:
Para que se aleje definitivamente el riesgo de ver una consolidación más amplia, que en el peor de los casos podría llevar al Ibex 35 (IBEX.MC) a la zona de los mínimos de octubre en los 8.850 puntos, es preciso que el Ibex 35 supere los 9.327-9.340 puntos, que son los máximos de la semana pasada y el techo de lo que aún podría ser una bandera de continuidad bajista.
La ruptura de esta resistencia de corto plazo abriría la puerta a una probable subida rápida hacia los altos del año en los 9.500-9.600 puntos, de cuya superación depende que podamos dar por terminada la tendencia bajista que inició el Ibex 35 en los máximos de 2017 desde la zona de los 11.200 puntos.
Situación tendencial:
Desde los mínimos que marcó el Ibex 35 durante la semana de Navidad de 2018 en los 8.286 puntos se están tratando de sentar las bases de una reestructuración alcista que lleve al selectivo a buscar en próximos meses objetivos que manejamos en los 10.300 puntos, que coincidirían con los altos del año 2017 en el Ibex 35 en su versión con dividendos en los 29.300 puntos.