La amenaza de corrección que hemos visto esta semana finalmente no ha tomado cuerpo tal y como refleja el cierre generalizado de los huecos bajistas que se abrieron el pasado miércoles en la apertura. El cierre de estos huecos es de todo menos un signo de debilidad y nos advierte de que aún podríamos ver un intento de contraataque alcista que mucho nos tememos podría ser muy vulnerable, pero que podría llevar al Eurostoxx 50 a atacar la zona de resistencia clave de medio plazo de los 3.575-3.600 puntos, que es la que debe superar para que gane muchos enteros un escenario de continuidad alcista en próximos meses, que es el que seguimos dando mayores probabilidades de éxito mientras una eventual caída no perfore los mínimos que marcaron los índices el pasado mes de agosto.