Economía

Bruselas vigila que ningún corrupto gestione el fondo de recuperación

  • 'Hombres de negro' aumentan la vigilancia de la ejecución de ayudas en España
  • Los funcionarios europeos analizan bases de datos en busca de conexión con delitos
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea. Imagen: Reuters

Ignacio Faes
Madrid,

La Comisión Europea vigila ya que ningún corrupto pueda gestionar los fondos de recuperación de la Unión Europea (UE). Los funcionarios de Bruselas intensifican la vigilancia del proceso de ejecución de las ayudas en España. Según ha podido saber elEconomista, una de sus principales misiones será el control de las personas que integren las oficinas que gestionarán el dinero. Los altos cargos europeos quieren evitar que ninguna persona salpicada por corrupción acceda a este trabajo.

La Comisión Europea hace años que busca soluciones a los problemas que genera que muchas administraciones -estatales, regionales o locales- entren en los procesos de adjudicación. En los últimos años, Bruselas ha introducido instrumentos de control para supervisar el gasto de la UE. El Sistema de Exclusión y Detección Precoz, por ejemplo, es una de las herramientas utilizadas por la Comisión para prevenir el fraude y la corrupción.

Ahora, los responsables de las oficinas económicas europeas cuentan con una base de datos que contiene información sobre personas y entidades condenadas por fraude, corrupción o participación en actividades delictivas. Esta herramienta informática ayuda a la UE a excluir a estas personas y organizaciones, detectar el fraude anticipadamente e imponer sanciones cuando sea necesario.

'Hombres de negro'

Según varias informaciones, dos altos cargos de la Comisión Europea serán los encargados de vigilar el cumplimiento en la gestión de los fondos y de las reformas y medidas exigidas al Gobierno. María Teresa Fábregas Fernández, directora en el Grupo de Trabajo de Recuperación y Resiliencia (Recover), y Declan Costello, director general adjunto en la Dirección General de Economía y Finanzas (DG Ecfin) de la Comisión Europea son los hombres de negro seleccionados por Bruselas para seguir la ruta del plan español y valorar la disposición de nuevos fondos.

La Comisión Europea es la responsable última de garantizar que los fondos de la UE se gasten de forma adecuada. El Parlamento Europeo aprueba el presupuesto de la UE y la Comisión Europea lo aplica. Este proceso se denomina "gestión presupuestaria". Los departamentos de la Comisión Europea elaboran informes anuales de actividad y declaraciones de fiabilidad, a través de los cuales rinden cuentas. Sin embargo, dado que la gestión de más del 80% de la financiación corre a cargo de los países de la UE, estos disponen de sus propios sistemas de control interno. Para garantizar la rendición de cuentas, cada país debe facilitar también sus cuentas, una declaración de gestión y un resumen de las auditorías.

La mayoría de los proyectos que reciben financiación de la UE están cofinanciados por la Comisión y los beneficiarios. De este modo se garantiza que los fondos de la UE se distribuyan con arreglo a las necesidades. Los beneficiarios asumen las responsabilidades operativas y financieras del proyecto. Las subvenciones concedidas se abonan íntegramente cuando los beneficiarios demuestran claramente que han completado con éxito el proyecto. En muchos casos, los beneficiarios deben demostrar cómo han gastado el dinero. Hay directrices y reglamentos sobre cómo presentar los costes subvencionables.

Así se controla el fondo

Las nuevas exigencias en materia de transparencia de la Unión Europea establecen que Todos los solicitantes se benefician de los principios de transparencia e igualdad de trato, tanto si solicitan una subvención gestionada por la Comisión Europea o por una autoridad de gestión, como si participan en una licitación. La transparencia garantiza que todos puedan acceder a las oportunidades de financiación de la UE. Las convocatorias de propuestas y las licitaciones se publican en el sitio web de la Comisión Europea y en el Suplemento al Diario Oficial de la Unión Europea.

La información sobre los beneficiarios de los fondos de la UE es pública. Los nombres de los beneficiarios, la finalidad y el destino de los fondos gestionados por la Comisión Europea, así como las cantidades percibidas, se publican anualmente en el Sistema de Transparencia Financiera (STF).

Cuando la financiación está gestionada por los países de la UE, los nombres de las organizaciones beneficiarias pueden encontrarse también en los sitios web nacionales. Aquí se incluye la financiación recibida en el marco de la política agrícola común, la política marítima y pesquera y los fondos estructurales y de inversión.

Todas las operaciones que afectan a los fondos de la UE se rigen por las normas de gestión financiera descritas en el Reglamento financiero de la UE y otros programas de financiación. En esta sección se destacan algunas de estas normas.

La gran parte de los fondos europeos se gestionarán a través del régimen directo, lo que significa que la Comisión Europea es directamente responsable de todas las etapas de la ejecución de un programa. Las tareas de supervisión de estos fondos las desempeñarán, de este modo, los servicios de la Comisión, ya sea en su propia sede, en las delegaciones de la UE o a través de agencias ejecutivas de la UE; no hay terceros. Los programas ejecutados mediante gestión directa representan alrededor del 20% del presupuesto de la UE para el período 2021-2027.

Así se dirigirán las ayudas

Buena parte de los fondos de 'NextGenerationEU', el instrumento temporal de recuperación, se ejecutarán en régimen de gestión directa, y en particular el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR), que destinará 672.500 millones de euros en préstamos y subvenciones a apoyar las reformas e inversiones de los Estados miembros. Debido a su carácter excepcional, la aplicación del MRR seguirá procedimientos específicos.

Los fondos se abonarán directamente a los Estados miembros en función de sus avances en la aplicación de los planes nacionales de recuperación y resiliencia. Los planes deberán ocuparse con eficacia de los retos señalados en el Semestre Europeo, y en particular en las recomendaciones específicas por país adoptadas por el Consejo. Los planes también deberán incluir medidas para hacer frente a las dificultades y aprovechar las ventajas de las transiciones ecológica y digital. Otro ejemplo de de programa gestionado directamente el de pymes (Cosme).