Ecoaula

Cómo ventilar las aulas sin morir de frío en el intento

  • Los expertos insisten en que las actividades en el exterior son siempre preferibles al interior

Carmen García
Madrid,

Hace dos meses la ventilación de cualquier zona para evitar los contagios de coronavirus no era un problema: sol, calor, buen tiempo en general. Sin embargo, en pleno mes de noviembre y viendo que las temperaturas van descendiendo, la comunidad educativa se preocupa por cómo van a conseguir una correcta ventilación sin coger un resfriado. Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y técnicos de la Asociación Mesura han elaborado una guía que da las pautas sobre cómo debe ser la ventilación en las aulas para reducir el riesgo de contagio por la Covid-19. El documento establece las recomendaciones para que la ventilación y la purificación del aire sea eficaz según el volumen de la sala, el número de edad de los ocupantes y la actividad.

En este documento, los profesionales indican que la reducción del riesgo de contagio se consigue disminuyendo la emisión y la exposición a las partículas en suspensión, también llamadas aerosoles. Los expertos insisten en que las actividades en el exterior son siempre preferibles al interior. No obstante, si tiene que ser en el interior, es preferible en aulas con ventilación natural. Además, se propone también la utilización de equipos extractores o impulsores individuales si la ventilación natural no es suficiente. La solución, indican, puede ser una combinación de opciones, decisión que algunos colegios y centros de estudios ya han empezado a tomar.

Cinco resultados posibles

La guía del CSIC establece un diagrama de flujo en el que proponen cinco soluciones posibles que dependerán principalmente de las condiciones climatológicas.

1. Hacer actividades en el exterior. Si el tiempo lo permite, será la primera opción para considerar. En el exterior el viento diluye la concentración de las partículas emitidas por una persona y las arrastra fuera del entorno.

2. Ventilación natural. Aumentar la renovación del aire interior con aire exterior abriendo puertas y ventanas para provocar un flujo de aire.

3. Ventilación individual forzada. Aplicable cuando la ventilación natural no es suficiente y se trata de renovar el aire interior con aire exterior mediante impulsión o tomando aire del aula y sacándolo.

4. Ventilación forzada centralizada. Se deberá aplicar cuando no hay ventilación natural y hay que hacer uso de sistemas de ventilación centralizados.

5. Purificación. Cuando no podemos llevar a cabo la ventilación natural, ni forzada central o individual, será necesario utilizar un purificador para eliminar las partículas susceptibles de contener virus del aire interior.

Proyecto piloto de purificación

No poder ventilar las aulas es un problema más común de lo que creemos. Es aquí donde adquiere una gran relevancia poner en marcha la ventilación forzada o la purificación de aire, como comentábamos. Para demostrar esta efectividad se ha llevado a cabo el exitoso y pionero estudio de campo del colegio La Salle La Paloma junto a Murprotec. Se trata de una medición que se puso en marcha en el mes de agosto para medir y testear la calidad del aire en un aula no ventilada de forma natural y para ello se instaló una Central de Tratamiento del Aire (CTA).

Para el estudio de campo se han utilizado dos aulas en condiciones similares: mismo número de alumnos, misma distribución y mismos metros cuadrados. En una de las aulas se han llevado a cabo los protocolos de ventilación natural indicados por las instituciones, y la otra ha permanecido ventilada mediante el sistema electrónico y en ningún momento ha abierto sus ventanas. Tras ocho semanas de mediciones los datos han confirmados que la CTA puede regular, minimizar y gestionar la calidad del CO2, humedad y temperatura dentro de los parámetros establecidos sin necesidad de abrir las ventanas del aula.

Visi Salazar, directora del colegio La Salle La Paloma, afirma que la principal ventaja es que este dispositivo de Murprotec: "asegure unas mediciones óptimas de CO2 y un flujo constante de renovación del aire". Además, manifiesta que "Viendo los resultados positivos de las mediciones, ha sido un acierto poder participar en el proyecto".

Primer municipio en la lucha contra la Covid-19

El Ayuntamiento de Las Rozas ha dado un paso al frente y ha llegado un acuerdo con LG para poner la última tecnología en materia de filtrado y purificación de aire, desarrollada por la empresa coreana, al servicio de la educación del municipio. De esta forma, todos los centros educativos públicos y concertados de la ciudad, participarán en este proyecto piloto en el que tendrán a su disposición el nuevo LG PuriCare 360 para probar su funcionamiento y efectividad en sus clases.

Se trata de un sistema de purificación 360 grados que absorbe la suciedad desde cualquier ángulo y un sistema de filtrado en 6 niveles que es capaz de eliminar el 99% de virus, polvo y alérgenos, el 99,7% de bacterias y hongos flotantes, entre otros. El equipo también incorpora un difusor de alta potencia, el Clean Booster, que impulsa el aire limpio a todos los rincones.

Las Rozas se convierte de esta forma en el primer municipio en poner a disposición de los centros educativos públicos y concertados de la ciudad la tecnología más innovadora en la lucha contra la pandemia.

Las empresas, comprometidas

La empresa SODECA ha entregado, con la colaboración del Consell Comarcal de Ripollès (Girona), purificadores de aire portátiles a las guarderías, escuelas e institutos de la comarca y también al municipio de Osona de Sant Quirze de Besora. Se trata de un acto solidario que nace de la necesidad de evitar que la curva de contagios continúe subiendo, sobre todo dando una mano a uno de los sectores más sensibles como es el escolar.

Entre las principales características de este equipo, que cuenta con un sistema patentado para la eliminación de bacterias, virus y microorganismos perjudiciales para las personas, destaca la pantalla digital, que indica los niveles actuales de contaminación, la etapa para la eliminación de olores y compuestos orgánicos volátiles, su placa recolectora rentable, etc.