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La confianza empresarial alemana golpea con fuerza al euro



    Gráfico EURUSD Gráfico JPYUSDPara esta mañana, las lluvias estaban pronosticadas en la Eurozona, y los meteorólogos han acertado. En una semana parcialmente soleada, pero con probabilidades de chaparrones, el euro se ha visto obligado a abrir el paraguas cuando de las nubes comenzó a caer agua. El culpable del mal tiempo ha sido el índice Ifo de confianza empresarial alemana.

    El Instituto de Investigación Económica alemán (Ifo) ha informado hoy de que el índice de confianza empresarial en el conjunto de Alemania cayó en abril hasta 102,4 puntos, frente a los 104,8 puntos de marzo.

    Se trata del nivel más bajo del índice desde enero de 2006, además es la primera vez que sufre un descenso desde noviembre de 2007. El dato es peor de lo esperado por el mercado ya que los analistas habían previsto una caída del indicador hasta los 104,3 enteros, algo que ha notado, y de que forma el euro, que se ha ido a niveles de 1,57 dólares cuando ayer se encontraba en los 1,59.

    Dudas en Europa

    Ahora, los exportadores del Viejo Continente son conscientes que no son inmunes a lo que pasa en Estados Unidos. Entre la crisis crediticia que experimenta la primera economía y el Reino Unido, y la inflación por las nubes por los costes energéticos y de alimentos, este sector cuestiona cada vez más las intenciones de algunos miembros del Banco Central Europeo (BCE) de subir los tipos de interés.

    La moneda comunitaria (EURUSD) viene descendiendo de sus máximos históricos en 1,6019 hasta la zona del 1,57. El recálculo de las tasas de referencia para los préstamos interbancarios LIBOR (tipo que mide el interés de los préstamos entre entidades bancarias) está desalentando cada vez más el objetivo del 1,60 en el corto plazo.

    A nivel interbancario, los operadores visualizan las resistencias en 1,6019 (máximo histórico); 1,6200 y 1,6500. Dado que los niveles de soporte en 1,5904 (ex récord histórico) y 1,5859 (máximo del 26 de marzo) han sido penetrados, los operadores contemplan el siguiente en 1,5641 (máximo del 20 de marzo).

    Un contundente dato de estas percepciones lo muestra la Chicago Mercantile Exchange (CME) con los contratos a futuro del EUR/USD. Éstos señalan que su open interest viene cayendo más de un 21% desde finales de enero. A su vez, ha descendido un 4.7% desde que se conoció que la Asociación de Bancos Británica (BBA) investigaría a sus miembros por posible manipulación de dichas tasas.

    El open interest en los contratos a futuro es el total de éstos en los que sus posiciones no han sido cerradas, liquidadas o entregadas aún. De esta forma, los derivados de tipos de interés muestran que los bancos podrían estar más reticentes a prestarse entre ellos, forzando a los bancos centrales a inyectar aún más liquidez y a no incrementar el coste del dinero.

    También será importante ver cómo van evolucionando las expectativas de recorte de éste por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) para la semana que viene. De acuerdo a los futuros de fondos de la Fed, las probabilidades de una reducción de 25 puntos básicos son del 82%, contra el 18% de que no haya cambios. No obstante, este panorama podría ir cambiando a medida que transcurran lo días y crecen estas incertidumbres. El rumbo del dólar dependería de lo que resuelva la Fed en los próximos días.

    Mirando hacia Asia

    El yen (49392840.4) están haciendo mucho ruido en el mercado de divisas, pero no es la única moneda que lo hace. Las monedas asiáticas comienzan a estar cada vez más en la mira de los inversores después de haber estado subvaluadas por mucho tiempo frente al dólar y al euro para favorecer a su sector exportador.

    Con un barril de crudo que en la pasada jornada amenazó llegar a los 120 dólares el barril y el arroz que día tras día bate nuevos máximos (siendo la principal comida de los asiáticos), la inflación en esa región no da tregua. Por ello, de esa parte del globo han decidido fortalecer sus monedas frente al dólar y al euro para combatir la presión alcista de los precios.

    Un caso interesante viene siendo el del dólar de Singapur. Hace pocos días, su Producto Interno Bruto (PIB) ha experimentado un sorprendente rebote, registrando el pasado trimestre un crecimiento anualizado del 16,9%. No hay dudas que es una gran cifra, más cuando se esperaba que creciese 10,2%.

    Por otra parte, los precios al consumo han crecido 6,5% en febrero, superando las expectativas de la autoridad monetaria de Singapur, que preveía que se anclara en 4,5%. En este contexto, y para alegría de muchos operadores, la entidad ha declarado en su reciente reunión que permitirá que su divisa continúe fortaleciéndose.

    El organismo se reúne sólo dos veces al año, lo que muestra una gran previsión de su política monetaria. En lo que va del año, esta moneda se ha apreciado un 5,65% frente al dólar.