Distribución
El semáforo nutricional que le cierra el paso a los ultraprocesados
- Coco es una app que ayuda a encontrar los alimentos más saludables
- Ofrece información nutricional y grado de procesamiento
Juan Ignacio Álvarez
El CoCo es una aplicación móvil basada en la economía colaborativa, autofinanciada y cien por cien independiente, que acompaña a los clientes mientras están haciendo la compra en el supermercado y les ayuda a conocer cuál es la composición nutricional y el grado de procesamiento de los alimentos que van a meter en la cesta.
Disponible para Android e iOs, basta con descargársela de forma gratuita e ir escaneando el código de barras de los alimentos. A partir de esta simple operación, el consumidor accede a una ficha de producto que se presenta en dos pantallas: en una aparece el contenido en grasa, sal y azúcar por cada 100 gramos en un semáforo en tres colores: verde -nivel bajo-, amarillo -nivel moderado- y rojo -nivel alto-, para que de una forma muy visual y gráfica el comprador sepa a qué atenerse.
Información detallada
A continuación, se muestra la información completa del producto, lo que comprende valor energético, hidratos de carbono, grasas -...de las cuales saturadas-, proteínas y sal. Una segunda pantalla ofrece una nota nutricional basada en el sistema científico de calificación nutricional Nutriscore, también a través de un semáforo de cinco colores, que va desde la letra A a la E. El color verde está asociado a la A -alimento muy saludable- y el rojo a la E -alimento poco saludable-.
Asimismo, aparece información relativa al grado de procesamiento de los productos a través de un ranking numérico conocido como Nova, el cual cataloga a los productos desde el 1 -alimento natural o muy poco procesado- hasta el 4 -producto ultraprocesado-.
Jean-Baptiste Boubault, fundador de El CoCo, cree que su app va a ayudar al consumidor, gracias a su claridad, a interpretar correctamente toda la información que se les está dando: "definitivamente la mayoría de nosotros no sabemos leer una etiqueta y nos vemos confundidos por nomenclaturas extrañas y porcentajes que nos cuesta interpretar. Lo bueno de estas clasificaciones que usamos en El CoCo es que son muy sencillas de entender. Los códigos numéricos -de la A a la E Nutriscore y del 1 al 4 Nova- nos dicen si un alimento tiene una calidad nutricional más o menos alta o está más o menos procesado. Además, hay un código de color donde lo verde es más nutritivo haciéndolo visualmente más sencillo".
El CoCo, acróstico de El COnsumidor COnsciente, quiere que el consumidor sepa lo que realmente está comprando y si los productos que se publicitan como saludables, lo son tanto como dicen. También lanza un mensaje a los fabricantes para que sean más transparentes sobre la información que dan sobre sus productos. Boubault explica que el código de barras es simplemente un número, único por producto, que permite reconocerlo.
"Así, el sistema lo lee y relaciona el producto con la base de datos que ya tiene y que incluye su información nutricional. Y sí, en las etiquetas está la información, pero nadie o casi nadie sabe interpretarla. Nuestro objetivo es poner transparencia donde hoy consideramos que hay opacidad. Un ejemplo, comprando Colacao no somos conscientes que en realidad compramos el 70 por ciento de azúcar", subraya.
Marketing engañoso
Sobre el marketing engañoso de algunos productos que denuncia El CoCo, Boubault es tajante: "ahora está de moda la vida sana y muchos productos de alimentación incorporan en sus etiquetas mensajes que sugieren que nos pueden hacer adelgazar o estar mejor -más sano, light, etc.-, cuando no es real en muchos casos y son engañosos para los consumidores. Luchamos contra la falta de transparencia de las marcas, que incorporan componentes -colorantes, aromatizantes, etc.- o procesos -hidrogenización o extrusión- que está comprobado que pueden dañar la salud, y eso sin mostrarlo abiertamente al consumidor".
Y pone otro ejemplo: "en el pan de molde Silueta integral de Bimbo pone integral, fibra y grano completo, y los colores hacen pensar que es muy natural y sano. Sin embargo, este producto tiene nada menos que 31 ingredientes, muchos de ellos aditivos y ultraprocesados".
No obstante, Boubault recalca que no todos los procesados son malos para la salud. "Una lata de atún puede tener una buena calidad nutricional -B en el índice de Nustriscore- y ser un alimento procesado según Nova -número 3-. El CoCo no te dice lo que puedes comer o no puedes comer. Te informa sobre las recomendaciones de la OMS, que insta a evitar los ultraprocesados y te da información veraz sobre los productos a nivel de su grado de procesamiento y su equilibrio nutricional".
25.000 productos a examen
En estos momentos, El CoCo cuenta con una base de datos de más de 25.000 productos -más o menos el 55 por ciento de los productos que escanean sus usuarios-. "Llegar a todos es nuestro gran reto y afortunadamente contamos con la ayuda de nuestros usuarios. Somos una aplicación colaborativa donde cualquiera puede proponer un producto que no haya encontrado en nuestra base de datos. Nos comprometemos a comprobar sus características y a incorporarlo lo más rápido posible al sistema, que lo traduce automáticamente a través de los algoritmos de Nustricore y Nova. En los próximos meses llegaremos a alcanzar el 80 por ciento de los productos", señala Boubault.
El creador de esta startup, que está estudiando la posibilidad de que los productos incluyan también información sobre si este ha sido cultivado o producido de forma sostenible, advierte: "nuestra aplicación no pretende cambiar la dieta de nadie ni obligar a nadie a comer de una determinada manera. A todos puede apetecernos comida rápida un día y no pasa nada. Lo que queremos es dar información, sencilla y fiable para que el consumidor elija sabiendo lo que tiene delante". No obstante, lamenta que en un país como España, reconocido por la riqueza de su dieta mediterránea, tengamos un 40 por ciento de niños con sobrepeso u obesidad.
Boubault destaca la labor pedagógica que su app puede tener: "Sin duda hay que educar desde niños en la alimentación saludable, pero actualmente nos encontramos con otras generaciones, que también son padres, que no han recibido esa educación. Nuestro objetivo es que tanto los gobiernos como la industria colaboren para que el bienestar de todos, en este caso a través de la alimentación, sea mayor. Y mientras lo hacen, ponemos nuestra aplicación a disposición de los consumidores preocupados por su alimentación. Además, contamos con diferentes canales, como nuestro blog o nuestro perfil de Instagram, en que vamos compartiendo información didáctica nutricional".
Boubault comenta que la aplicación ha tenido muy buena acogida inicial por parte de los usuarios: "Más de 20.000 personas ya se la han descargado. Y teniendo en cuenta que no hacemos campañas de marketing tradicionales, es muchísimo. Nuestra comunidad crece a un ritmo del 30 por ciento a la semana. Incluso hemos llegado a picos de 25.000 productos escaneados en un día desde la app.
Bases de datos
Sobre la posibilidad de desarrollar en el futuro otra app relacionada con la nutrición o la industria alimentaria, Boubault asegura que "actualmente, estamos centrados en hacer crecer la base de datos y la comunidad de El CoCo, y seguir mejorando las funcionalidades de nuestra aplicación, pero no descartamos otras iniciativas en el futuro relacionadas con la nutrición".