Desarrollo sostenible

Brasil pide a Inveravante y Elecnor más potencia verde



    La propuesta del presidente brasileño, Lula da Silva, de impulsar el desarrollo de las energías limpias en Latinoamérica tiene un efecto muy positivo sobre nuestra economía, ya que gran cantidad de los contratos que se están adjudicando están beneficiando a compañías españolas especializadas en la construcción y gestión de parques renovables.

    A finales de la semana pasada conocíamos que Iberdrola Renovables se había hecho con 9 parques eólicos que sumaban un total de 258 megavatios, pero ésta no ha sido la única beneficiada.

    Elecnor ha logrado ampliar su cartera de generación en 46 megavatios. Lo ha hecho a través de su filial Enerfín y gracias a esta gestión cuenta en este momento con una cartera de 300 megavatios en el país carioca. La compañía ya obtuvo en la licitación anterior, celebrada en diciembre, la adjudicación de 96 megavatios. Según los cálculos del grupo invertirán 100 millones de euros.

    Otra de las grandes beneficiadas ha sido Gestamp Renewables, que se ha hecho con 115 MW de energía eólica en cinco parques. Esto le reportará a la compañía 33 millones de dólares (26 millones de euros) anualmente.

    Se trata de un negocio que la empresa valora positivamente, puesto que para el director de Gestamp Wind, Eduardo García, "esta adjudicación consolida la presencia de la compañía en Brasil ". En concreto, se trata de la ampliación de los parques de alta producción que actualmente está gestionando Gestamp en el país.

    Por su parte, el grupo gallego Inveravante, a través de su filial de energía Avantegenera, ha entrado en el mercado de la energía hidroeléctrica de Brasil con la adquisición de varios proyectos hidroeléctricos en diferentes puntos del país que suman una potencia de 88 megavatios. Esta operación se efectúa en alianza con un socio local con amplio conocimiento del mercado de la energía brasileña a través de la sociedad Megabrasil Energía, en la que la corporación española posee un 65 por ciento y su socio, la familia García, el 35 por ciento restante.