Los grandes supermercados franceses no podrán tirar comida
En virtud de un proyecto de ley aprobado el jueves dentro de una ley más amplia sobre energía y medio ambiente, los supermercados de más de 400 metros cuadrados se verán forzados a firmar contratos antes de julio de 2016 para donar los productos no vendidos pero aún comestibles a organizaciones de caridad o para su uso como alimentación animal o compost agrícola.
El incumplimiento podría exponersles a dos años de cárcel y a multas de 75.000 euros.
La federación francesa de comercio y distribución (FCD) dijo que era un error que sólo se aplicara a los grandes supermercados, que dijeron representan apenas un 5 por ciento del desperdicio total de alimentos.
Los franceses desechan 20 kilos de comida por persona y año, lo que cuesta entre 12.000 y 20.000 millones de euros anualmente, según el Ministerio francés de Medio Ambiente.
La ley aún ha de votarse en la Cámara Baja del Parlamento el 26 de mayo antes de ir al Senado.