Cultura

El héroe nacional Shevchenko no consigue unir a ucranianos y rusos



    KIEV (Reuters) - Cuando el presidente Vladimir Putin visitó Ucrania hace una década, recitó cuatro líneas de un verso del poeta nacional Taras Shevchenko para demostrar el amor de Rusia por sus vecinos eslavos.

    Hace dos años, Putin anunció con gran ostentación y tras entrevistarse con el presidente ucraniano que los dos países celebrarían juntos el 200 aniversario del nacimiento de Shevchenko.

    En diciembre, Putin dijo que los preparativos para el aniversario marchaban a pleno rendimiento y declaró: "Taras Shevchenko fue tal visionario, que se nos anticipó y nos legó tanto".

    El aniversario fue el domingo y transcurrió sin ninguna señal de que Putin lo conmemorara. No hubo mención al respecto en la web del Kremlin en un fin de semana en el que Putin pasó tiempo en los Juegos Paralímpicos de invierno en el centro turístico de Sochi, a orillas del mar Negro.

    Las celebraciones por el poeta, artista y escritor - reverenciado en Ucrania como lo es William Shakespeare en Reino Unido - quedaron ensombrecidas por los acontecimientos que se desarrollaban en la costa del mar Negro - en Crimea, donde las fuerzas rusas se han hecho con el control de manos de Ucrania.

    Un día que tenía como objetivo demostrar unidad sirvió para subrayar lo mucho que se han hundido las relaciones con Rusia y reveló la gran división en Ucrania sobre el futuro del país - con Moscú o la Unión Europea, unidos o divididos.

    "Somos un país, somos una familia y estamos aquí con nuestro poeta Taras", dijo el presidente en funciones Oleksander Turchinov en un acto en Kiev para conmemorar el aniversario.

    Esa imagen pronto quedó destruida cuando unos manifestantes fueron golpeados en una manifestación en Crimea y grupos rivales se enfrentaron entre sí en la ciudad oriental de Donetsk. El asalto a un edificio del gobierno regional de Luhansk, también en el este, reforzó la imagen de caos más que de unidad.

    SÍMBOLO DE RESISTENCIA

    Probablemente no hay figura con más probabilidades de unir a los ucranianos que Shevchenko, el padre de la literatura ucraniana y, hasta cierto punto, del idioma ucraniano. Su estatua se puede ver en muchas ciudades y pueblos de todo el país.

    Ya que pasó gran parte de su vida en el imperio ruso, los rusos también tienen motivo de celebración. En ambos países, es reverenciado por prevalecer contra todo pronóstico y por los versos que escribió sobre resistencia y desafío.

    Tras años como sirviente, se ganó la libertad con las ganancias de un cuadro que pintó, pero luego fue exiliado por el zar Nicolás I y obligado a servir como soldado en el ejército por escribir una poesía considerada incendiaria. Se le ordenó no pintar o escribir, pero continuó con ambas.