Abono de los pandas chinos para un té de primera clase
An Yanshi, un empresario del suroeste de china, cultiva té en las montañas de Ya'an, en la provincia de Sichuán, utilizando toneladas de excrementos de osos panda que viven en los centros de reproducción cercanos.
La primera tanda de té cultivado con abono de panda se venderá en lotes de 50 gramos que costarán unos 22.000 yuanes (unos 2.600 euros) cada uno, un precio que según An lo convierte en el té más caro del mundo. La gente suele utilizar unos 3 gramos de té por taza.
El empresario defiende el precio afirmando que destinará parte de los beneficios de las primeras tandas a un fondo medioambiental. Las siguientes remesas serán más baratas, añadió.
"Doy gracias al cielo y la tierra por bendecirnos con este té ecológico de panda", dijo este ex profesor y periodista de 41 años en un acto de promoción durante el fin de semana.
"Sólo quiero enviar a la gente del mundo el mensaje de convertir el desperdicio en algo útil, y la cultura de reciclar y utilizar fertilizantes orgánicos".
Vestido en un traje de panda para promocionar su té, An invitó a una docena de personas para que le ayuden a recoger a mano la primera cosecha de té en su plantación durante el fin de semana.
El fertilizante hace que el té sea muy bueno para la salud, aseguró An, porque los pandas sólo comen bambú salvaje y absorben apenas una parte de los nutrientes de su comida.
Y los pandas proporcionan mucho abono.
"Son como una máquina que produce fertilizante orgánico en masa", explicó."Siguen comiendo y siguen produciendo heces".
"Además, absorben menos del 30 por ciento de los nutrientes de la comida, y eso significa que el 70 por ciento de los nutrientes siguen en sus excrementos", añadió.
Tras preparar los primeros brotes de té, An describió la infusión como fragante y suave. Algunos de sus invitados, sin embargo, quedaron poco impresionados.
"Se vende a un precio tan astronómico que quizá es sólo ruido", dijo li Ximing, de 49 años.