Cultura
Londres y Madrid bloquearían acuerdo de transgénicos en la UE
La reunión de ministros de Medio Ambiente en Bruselas el viernes votará sobre un compromiso danés diseñado para romper el bloqueo que ha dividido a los gobiernos los 27 estados miembros desde que se propusieran los borradores de la normativa en 2010.
El cambio en la norma fue elaborado por la Comisión Europea para tratar de desbloquear la toma de decisiones en la UE sobre aprobaciones de cultivos modificados genéticamente, que en más de 12 años sólo ha visto dos variedades aprobadas para su cultivo.
Pero la fuerte oposición de Francia, Alemania y algunos otros países de la UE ha frustrado los esfuerzos de acordar nuevas normas.
"Las cosas todavía parecen extremadamente difíciles", dijo a Reuters por teléfono el jueves la ministra danesa de Medio Ambiente, Ida Auken, quien liderará las negociaciones.
"Tenemos una pequeña minoría que lo bloquea por el momento, pero todavía esperamos disolverla y va a ser de uno o dos países
al final", dijo.
Aunque Francia, Alemania y Bélgica es improbable que cambien su oposición, Reino Unido y España inicialmente parecía que habían apoyado el compromiso danés, dijeron fuentes de la UE implicadas en las negociaciones.
Pero ahora se espera que Londres y Madrid voten en contra del plan a menos que se hagan ciertas concesiones. Auken no especuló con los posibles cambios que ganarían el apoyo de estos países.
"Voy a intentar usar el argumento de que por qué no dar a los 22 países el derecho a decir 'no' cuando realmente quieren que está bien", dijo Auken. "¿Por qué impedir a alguien que tenga el derecho de decir 'no' en su propio territorio?".
ULTIMÁTUM DANÉS
El plan danés primero vería que las compañías que quieran la aprobación de la UE para cultivos modificados genéticamente acuerden anticipadamente no comercializar el producto en países que no quieren su cultivo, a cambio de recibir la aprobación para cultivar en otros miembros de la UE.
Si esto no tiene éxito, los países serían capaces de utilizar preocupaciones medioambientales para prohibir su cultivo en todo o parte de sus territorios, siempre que respeten las normas de la Organización Mundial de Comercio y las normas internas de le UE, mostró el borrador del compromiso.
Auken dijo que si no se podía alcanzar un acuerdo el viernes, Dinamarca estudiaría mantener más conversaciones sobre los planes si algunos de los países que se oponen muestra disposición a llegar a un acuerdo.
"Si los motivos son que no vamos a decir 'sí' a esta propuesta sin importar lo que se proponga, entonces por supuesto consideraremos si deberíamos dar otra oportunidad", dijo.
Si Dinamarca no consigue que haya acuerdo no está claro si Chipre intentaría reavivar las negociaciones cuando entre en la presidencia rotatoria de la UE a partir de julio.
Los ecologistas han criticado el compromiso danés, diciendo que fracasa a la hora de ofrecer a los gobiernos suficiente base legal para prohibir estos cultivos frente a aquellos propuestos en el Parlamento Europeo.
El Parlamento tiene que acordar las normas junto con los gobiernos nacionales para que la regulación entre en vigor.