El apoyo de JxCat al PSC en la Diputación de Barcelona dinamita la estrategia soberanista
- ERC habla de un antes y un después de consecuencias inciertas y la ANC se moviliza
- La nueva presidenta del ente provincial, Núria Marín, aboga por el diálogo y el entendimiento
Estela López
Barcelona,
ERC intentó ayer hasta el último minuto un acuerdo con JxCat para controlar desde el soberanismo la Diputación de Barcelona, pero los neoconvergentes fueron inflexibles y prefirieron dar su apoyo a la presidencia propuesta por el PSC -que tenía los mismos diputados que los republicanos-, lo que hizo añicos la hasta ahora tan reivindicada por JxCat unidad del independentismo. Desde las filas republicanas hablan de un antes y un después de consecuencias inciertas.
La decisión de la formación liderada por Carles Puigdemont también despertó la ira de la Assemblea Nacional Catalana (ANC), con decenas de personas que entre pitidos y abucheos mostraron pancartas en las que se podía leer el lema de la entidad soberanista para el próximo 11 de septiembre (Objetivo: independencia) y la frase Ni pactos ni abstenciones con el 155.
Salvo estas protestas a la entrada de la Diputación, el primer pleno del nuevo mandato se desarrolló sin sorpresas, y la alcaldesa de L'Hospitalet, la socialista Núria Marín, fue elegida en segunda votación como nueva presidenta de la tercera institución de Cataluña y la Diputación española que gestiona más recursos, con un presupuesto de casi 1.000 millones de euros.
Reproches
Lo que sí quedó claro en el turno de intervenciones es que el acuerdo entre el PSC y JxCat no gusta a ningún otro partido.
Cs y PP recelan de la influencia independentista sobre los socialistas, ERC lamentó que JxCat no se decantase por "otras opciones" en favor del soberanismo, y los comunes -que defendían un tripartito con el PSC y ERC- ironizaron sobre "los que hace dos días nos señalaban en el ayuntamiento por pactar con los carceleros -por el acuerdo entre Colau y el PSC-", en referencia a JxCat.
Tras tomar posesión del cargo, Marín abogó por el diálogo y el entendimiento, e hizo un llamamiento a "impedir que aquello que nos separa nos impida trabajar juntos en aquello que nos une".
Promesa de cargos
La división entre ERC y JxCat se evidenció hasta en el procedimiento de promesa del cargo. Los diputados de ERC optaron por una fórmula común: "Prometo por imperativo legal, así como prometo trabajar para alcanzar la república catalana, la absolución de las personas presas políticas y el retorno de las exiliadas".
Por su parte, los diputados de JxCat optaron por fórmulas diversas en las que evitaron mencionar cualquier objetivo secesionista -solo un diputado habló de derecho de autodeterminación-. Sí coincidieron en defender la libertad de los presos soberanistas y el retorno de los "exiliados".