Cataluña

Bimbo vende el negocio de pan de molde Panrico a Adam Foods

  • La transacción está sujeta a la resolución del TS sobre el ERE de Panrico

Iván Gutiérrez (Barcelona)

Bimbo sigue maniobrando para que la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) de luz verde a la adquisición de Panrico, que compró al fondo Oaktree por 190 millones.

Esta operación se cerró hace casi un año, pero sigue congelada ante el hipotético monopolio que acontecería la fusión de ambas en algunos segmentos de negocio donde Bimbo es líder y Panrico su principal competidora.

Uno de los productos que le podría generar problemas a Bimbo ante la CNMC es precisamente el pan de molde, donde Bimbo es líder absoluto en España con un 39,6 por ciento de cuota de mercado, y Panrico tiene el 9,7 por ciento. Por lo que ambos coparían prácticamente la mitad del mercado, algo que el regulador no permitiría y bloquearía la incorporación de los activos de Panrico.

Por ello, la panificadora mexicana ha decidido desprenderse de esta división para lograr la autorización del regulador. Bimbo ha vendido el negocio de pan de molde Panrico a la española Adam Foods, empresa que comercializa las marcas de galletas Cuétara y Artiach, los patés La Piara, la miel Granja San Francisco o el caldo Aneto. Una operación asesorada por KPMG y los bufetes Cuatrecasas y Roca Junyent. Esta empresa surgió de la escisión del grupo Nutrexpa en 2015, de la que surgió Adam Foods e Idilia Foods (que se dedica al negocio de cacaos con Cola Cao, Paladín o Nocilla).

Transacción bajo condición

La cuantía de la operación no ha sido reconocida por ninguna de las partes, pero la operación incluye el traspaso de dos fábricas situadas en Canarias y Portugal. La transacción también está sujeta a algunas condiciones. Estas son que la CNMC ratifique de forma definitiva la operación entre Bimbo y Oaktree (propietaria de Panrico), que prevé cerrarse antes del verano. La otra condición depende del Tribunal Supremo, que tiene que dictaminar si el ERE que ejecutó Panrico sobre 745 trabajadores.

Aunque en un primer momento, Bimbo no iba a quedarse el negocio del pan de molde de Panrico por los problemas que pudiesen ocasionar ante Competencia, el fondo Oaktree era quien debía encargarse de vender esa pata del negocio. Pero finalmente, el acuerdo de compra de Panrico se ha modificado y Grupo Bimbo se queda con el 100 por cien de sus acciones.

De hecho, la principal fijación que tiene Bimbo con la compra de Panrico es reforzar su posición en el sector bollería donde no tiene tan buenos resultados como en el segmento del pan de molde.

Con la compra, la empresa de los Servitje incorporaría marcas como Donuts, Donettes, Bollycao o la Bella Easo, muy arraigadas en España. Por la parte que le toca a Adam Foods, uno de los líderes del sector galletero, se mete de lleno en el duro mercado del pan de molde.

Allí deberá competir contra la propia Bimbo y las diferentes marcas blancas, que se reparten el 46 por ciento de la cuota de mercado.

El plan de Bimbo

La mexicana sigue limando su proceso de transformación y crecimiento en Europa, Oriente Medio y África, por ello ya ha instalado a su ex número dos mundial, Pablo Elizondo, en las oficinas de Madrid, tal y como adelantó el Economista.

Grupo Bimbo tiene una hoja de ruta muy definida y el primer paso ya lo dio en 2011, cuando compró la filial española de Bimbo por 115 millones de euros, que era propiedad del fondo norteamericano Sara Lee.

El siguiente paso que quiere cerrar es la propia adquisición de Panrico, por la que se estima que ha pagado 190 millones a Oaktree. Una vez tenga el visto bueno del regulador de la competencia, Bimbo incorporará además de las marcas de bollería anteriormente citadas, las plantas de Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona), Paracuellos del Jarama (Madrid), San Gines (Murcia), Espejo (Álava), Sintra(Portugal), Valladolid, Sevilla, Puente Genil, Santiago de Compostela y Palma de Mallorca.

Con todas estas nuevas fábricas, Bimbo quiere cerrar las suyas propias más antiguas como ya ha hecho en Palma de Mallorca, para unificar la producción en las nuevas que herede de Panrico.

La fábrica que está en el punto de mira es la de Granollers (Barcelona), que según fuentes internas será la siguiente en echar la persiana por sus altos costes laborales. Además de tener una infraestructura obsoleta que ya se ha quedado fuera de las inversiones.