Cataluña

Oriol Pujol se niega a declarar ante el juez por las ITV



    El exdiputado de CiU en el Parlament Oriol Pujol se negó ayer a declarar ante la juez como imputado por los presuntos delitos de cohecho y falsedad documental. El hijo del expresident de la Generalitat debía comparecer por supuestamente haber cobrado de un empresario amigo para usar su influencia política en varias operaciones empresariales, dentro del caso ITV.

    El diputado justificó su decisión ante la juez del Juzgado de Instrucción 9 de Barcelona por "consejo" de su abogado. Asimismo, dijo que ya había declarado dos veces como imputado por los mismos hechos ante el Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC), cuando todavía era diputado.

    Declaraciones anteriores

    A la salida de los juzgados, el político, que abandonó la Ciudad de la Justicia acompañado por su abogado, Xavier Melero, tampoco quiso pararse a hacer declaraciones ante los medios de comunicación. No obstante, su abogado explicó que Pujol se acogió a su derecho a no declarar porque "se ha remitido a lo que ya había declarado ante el TSJC" ya que, aunque se trata de una nueva imputación en términos formales, los hechos son los mismos y no ha habido novedades.

    Melero recordó que ante el TSJC el político ya defendió que no había cobrado por sus gestiones, aunque sí reconoció que había intermediado en algunas que eran de interés público, pero sin cobrar.

    También su mujer, Anna Vidal, y el empresario y amigo del político, Sergi Alsina (los dos imputados) se acogieron a su derecho a no declarar, alegando los mismos motivos que Oriol Pujol para no dar explicaciones a la juez del caso, Silvia López Mejía.

    Según el fiscal, Fernando Maldonado, Alsina simuló contratar a la mujer de Pujol para trabajos de asesoramiento en operaciones empresariales entre 2010 y 2012, aunque en realidad quien cobraba era Pujol por su "inestimable" colaboración y uso de su posición. El fiscal considera que Oriol Pujol presuntamente "facilitó el acceso" al presidente de la Generalitat, Artur Mas, y a altos cargos de la conselleria del ramo, entre otros. El fiscal cree que los servicios que realmente pagaba Alsina eran presuntamente los que prestaba Oriol Pujol, "quien utilizaba sus múltiples influencias políticas en beneficio propio y de los otros dos imputados".

    El importe total de las facturas giradas y cobradas por Vidal por los servicios aparentemente contratados y no prestados en los años 2008, y de 2010 a 2012, fue de 499.060 euros, según la Fiscalía. La venta de la planta de Sharp en Sant Cugat (Barcelona) y la deslocalización de Yamaha son dos de las operaciones supuestamente asesoradas.