Cataluña

Reforma fiscal y círculo virtuoso

    Frederic Borràs, Presidente de Association for Corporate Growth


    Las políticas fiscales son las únicas que quedan en manos de los distintos estados de la Unión Europea, ya que tanto el tipo de cambio como el de interés están más allá de su alcance desde que estamos en el euro.

    El gobierno ha anunciado que va a acometer una reforma fiscal amplia y profunda de todos los impuestos, para lo que según palabras del Ministro de Hacienda, pretende un "modelo tributario integral y completo", que supere el actual que está lleno de "parches" que han ido poniendo sobre la marcha los diferentes gobiernos a medida que avanzaba la crisis y cuyo objetivo no era otro que aumentar la recaudación para hacer frente a un galopante déficit.

    Este déficit aumentó a medida que disminuyeron las recaudaciones de IVA, por la bajada del consumo y bienes de inversión, la consiguiente disminución de los beneficios de las sociedades y las retenciones por el IRPF de los trabajadores a medida que iban disminuyendo sus ingresos , como consecuencia de este círculo vicioso que termina de agravarse cuando a las menores recaudaciones hay que sumarle los gastos por el subsidio de desempleo.

    El pistoletazo de salida de esta reforma lo ha dado el informe de la comisión nombrada al efecto, conocida como Lagares, por el nombre de su presidente. A partir de aquí el Gobierno ha dicho que están trabajando para presentar un proyecto de lo que tiene que ser la nueva normativa fiscal , para que esté en las Cortes este verano y se pueda aprobar antes de fin de año con objeto de que se pueda aplicar el 2015.

    Del referido informe se desprenden conclusiones como que una subida del IVA se soportaría mejor que las altas cargas sociales que gravan los salarios, que perjudican nuestra competitividad para poder exportar. Se trata de que a través de las políticas fiscales se ayude en un entorno económico ya mejorado en el que se vislumbra un crecimiento que algunas voces autorizadas estiman que puede llegar hasta el 1,5% del PIB, para que pasemos de un circulo vicioso a uno de virtuoso en el que estaríamos si aumentara la recaudación del IVA por la subida de tipos y aumento del consumo, consecuencia del crecimiento que pudiera crear empleo, cosa que aumentaría las retenciones de IRPF e incluso de las contribuciones sociales , aunque a tipos más bajos. La guinda de este círculo virtuoso la pondría en el pastel el hecho de que además de estos aumentos de recaudación pudiéramos bajar la contribución por subsidio de paro en el momento en que este arranque nos llevara a una situación de generación neta de empleo.

    Aquí solo hemos podido comentar aspectos muy limitados de esta reforma fiscal , pero si vale la pena aprovechar la oportunidad que brinda para potenciar esta etapa de crecimiento económico que parece está arrancando , con medidas de política fiscal en la dirección adecuada que nos llevaran a potenciar la parte virtuosa del nuevo ciclo.