Cataluña

Mutualistas de Fiatc culpan a Castells por su pésima inversión en La Seda



    Un grupo de mutualistas de la aseguradora Fiatc acusan al presidente de la compañía, Joan Castells, de "esconder y camuflar las pérdidas millonarias que generó a la mutua su inversión en el capital de La Seda de Barcelona".

     Ante la negativa de la dirección a dar explicaciones, el grupo ha iniciado los tramites para convertirse en la Asociación de Mutualistas de Fiatc y reclamar responsabilidades a Castells.

    Según el portavoz de este grupo, Juan Pedro Calderón, "la inversión de Fiatc en La Seda ha generado unas pérdidas que estimamos entre siete y diez millones de euros en la banda baja, pero incluso pueden ser mayores". La futura asociación considera que Castells "escondió y camufló esas pérdidas en los balances de Fiatc de los años 2006 y 2007" y que "nunca nos ha dado las explicaciones pertinentes que ahora vamos a reclamar". Calderón se queja de que pese a las consultas que han realizado a la dirección "nadie nos contesta".

    La consecuencia de estas pérdidas millonarias ha sido, según Calderón, "incrementos anuales de las cuotas de los mutualistas del orden del 10-12 por ciento, muy por encima del IPC", ya que, en su opinión, "era la única forma de cubrir el agujero provocado por las minusvalías que generó la compra de acciones de La Seda". La asociación se plantea acudir a los tribunales para defender los intereses de los 900.000 mutualistas de Fiatc.

    La versión de la dirección

    Desde la dirección de Fiatc reconocen que Juan Pedro Calderón se ha puesto en contacto con ellos para solicitar información, pero denuncian que "es socio del abogado Jacinto Soler Padró y está coordinado con él". El juzgado de Instrucción número 2 de El Prat de Llobregat (Barcelona) ha admitido a trámite una querella de Soler Padró contra Joan Castells por su doble condición de exvicepresidente de La Seda de Barcelona y presidente de Fiatc. El magistrado ha enviado un requerimiento a los Mossos d'Esquadra para que investiguen esta doble condición y la existencia de un presunto documento firmado por él mismo y entregado al exdirector de La Seda, Aurelio González Isla, en el que "se le requería para que al margen de que otras aseguradoras pudieran ofrecer condiciones más ventajosas en la contratación de seguros, se optara en cualquier caso en que la empresa aseguradora fuera Fiatc".

    Castells fue nombrado vicepresidente de La Seda en junio de 2003, bajo la presidencia de Rafael Español, con el que también compartió consejo en la textil Dogi. En junio de 2009, cuando Español se vio obligado a dimitir, Castells asumió la presidencia, cargo que mantuvo durante sólo diez días.