Fergo Aisa tira la toalla y entra en concurso con 250 millones de deuda
Fergo Aisa optó ayer finalmente por asumir su situación de insolvencia después de más de dos años y medio maniobrando para no entrar en concurso de acreedores. La inmobiliaria presidida por Carlos Fernández Gómez había superando entre el 2011 y 2012 otros concursos, instados por Caixa Catalunya y la consultora Richard Ellis, pero ayer no quiso alargar más los plazos de la agonía.
El hecho que precipitó la insolvencia de la empresa, que cuenta con un pasivo de 250 millones de euros según informa Europa Press, tiene su origen en el conflicto que mantenía con dos exdirectivos. En concreto, Juan Bautista Fernández Araque y Rafael María Salido habían instado el concurso de la empresa en enero, pero Fergo Aisa había logrado paralizar el proceso intentando un pacto que no acabó de fructificar.
Según informó ayer el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña, los representantes de la compañía y los acreedores habían sido convocados ayer a una vista con el objetivo de lograr un acuerdo que no desembocara en concurso. No obstante, Fergo Aisa prefirió por carta no poner objeciones, con lo que se "allanó la solicitud de concurso necesario" y se procedió "a declararla en concurso de acreedores", según el auto del Juzgado mercantil número 5 de Barcelona.
En concreto, Fergo Aisa debe un total de 526.275,8 euros a Juan Bautista Fernández (exdirector general) y 127.051,67 a Rafael María Salido, los dos exdirectivos que solicitaron el concurso, en enero de este año.
El titular del juzgado barcelonés número 5, Daniel Irigoyen, ha optado por el momento porque la compañía mantenga un régimen de intervención y no de suspensión de las facultades de administración y disposición del patrimonio de la sociedad "sin perjuicio de la administración concursal". El auto del juez recalca que "el nombramiento de la Administración Concursal no es inmediato porque depende de la CNMV".
Proyectos en Arabia
Asimismo, el juez también pone de manifiesto que la compañía cuenta con "operaciones en curso sin concluir, en concreto la constitución de una joint venture con un grupo constructor de Arabia Saudí y una ampliación de capital. Estas circunstancias determinan que por el momento deba acordarse el régimen de intervención.
El origen de Fergo Aisa tiene su origen en la fusión en 2009 de la inmobiliaria catalana cotizada Aisa (entonces presidida por el abogado catalán Genís Marfà), con la constructora Fergo, del empresario Carlos Fernández.
En ese momento, Aisa ya estaba dañada por la crisis del ladrillo y había tenido que hacer frente a un proceso que le situó de forma temporal en suspensión de pagos. En ese momento, fue la aseguradora Asefa la que impulsó el concurso. Aisa, dirigida por Marfà, abrió entonces un proceso de búsqueda de socio para lograr el equilibrio, que le llevó a plantear una alianza con la firma británica First Mile, que iba a aportar 70 millones de euros a Aisa en concepto de préstamo convertible en capital. El pacto no prosperó y también se intentó fusionar la compañía con el grupo Hemeretik y Nozar.