La Seda celebra un consejo de administración crucial para su futuro
El consejo de administración de la empresa química La Seda de Barcelona se reunirá este mediodía para estudiar la propuesta que sobre el futuro de la compañía plantea el fondo estadounidense Anchorage Capital Group, su principal acreedor. El abogado y exsecretario general de CDC, Miquel Roca Junyent, ha comunicado a La Seda Barcelona (LSB) su renuncia como presidente de la junta general de accionistas de la compañía por motivos personales
Se trata de una reunión crucial para la empresa, ya que Anchorage presentará a los miembros del consejo una "propuesta financiera, no industrial", que puede poner en riesgo la viabilidad de la compañía, han explicado a Efe fuentes próximas a la negociación.
La Seda se encuentra en una situación económica muy delicada, agravada por la pugna que mantienen su primer accionista, la portuguesa BA Vidrio, liderada por el actual presidente de la compañía, Carlos Moreira da Silva, y Anchorage Capital.
El consejo de La Seda deberá decidir hoy si respalda la propuesta de Anchorage. De ser así, el plan tendrá que ser aprobado también por el 75 % de los acreedores, lo que a día de hoy parece improbable que suceda, según las mismas fuentes.
Y es que los cinco principales acreedores financieros de La Seda crearon un comité de pilotaje o "steering committee" en el que, a día de hoy, ya sólo está presente Anchorage Capital, después de que el miembro de Deutsche Bank presentara también su renuncia.
Días atrás, Anchorage rechazó la oferta de plan industrial presentada por el consejo de La Seda para reflotar la compañía.
Este plan contemplaba llevar a cabo una inyección de capital que respetaba el derecho de suscripción preferente de todos los accionistas de la empresa, incluidos los minoritarios.
Esa propuesta fue apoyada por BA Vidrio, que aseguró que acudiría a la ampliación poniendo el dinero que le correspondiera.
Sin embargo, la firma portuguesa acabó cancelando su compromiso de suscripción de este eventual aumento de capital, al considerar que en estos momentos no es posible alcanzar un acuerdo con los bancos coordinadores del préstamo sindicado para refinanciar la deuda.