Dirección y sindicatos de Nissan rompen la negociación del ERE por distancias "insalvables"
- La compañía cifra en "centenares de millones" las diferencias que les separa
- La multinacional da de plazo a los trabajadores hasta el 4 de agosto para suscribir su última propuesta
- El comité convoca una asamblea para valorar la oferta y tacha la firma de 'chantajista'
María Teresa Coca
Barcelona,
Las maratonianas negociaciones de los últimos días entre la dirección y los sindicatos de Nissan para pactar el ERE que afectará a 2.525 empleados, por el cierre de los tres centros de producción de la multinacional en Barcelona, han finalizado sin acuerdo la madrugada de este sábado.
Las distancias entre ambas partes se mostraron insalvables durante la reunión que mantuvieron en la jornada de ayer viernes, día en que finalizaba legalmente el periodo de consultas. La multinacional, que sostiene que ha mejorado la oferta de indemnizaciones pero que la distancia entre las posturas es "insalvable", mantendrá su última propuesta hasta el próximo martes 4 de agosto y advierte de que si es rechazada "la empresa procederá de conformidad con la normativa vigente", iniciando la ejecución legal del expediente de regulación de empleo.
El director de operaciones de Nissan en España Frank Torres, responsable de las negociaciones, ha advertido este sábado de que en caso de que el expediente se judicialice, la posible búsqueda de una alternativa industrial quedaría paralizada. Torres ha asegurado que lo que hay ahora sobre la mesa es "una oferta de máximos" por parte de la multinacional, que está "muy por encima de la ley de máximos laborales" y que las discrepancias con los sindicatos "son insalvables" a día de hoy, porque se trata de "varios centenares de millones de euros de diferencia en la parte económica".
Por su parte los sindicatos, que tachan a la compañía de "chantajista" y de haber roto las negociaciones de forma unilateral -extremo que la dirección niega-, han convocado una asamblea de trabajadores para este mismo sábado en las instalaciones de la factoría de Montcada i Reixac -una de las tres a las que la multinacional nipona echará el cierre-.
Sobre la mesa resta una propuesta de indemnizaciones, supeditada a que la plantilla abandone la huelga que inició en mayo pasado y se reinicie la producción a finales de agosto, tras la parada técnica de verano, en los tres centros productivos. Las indemnizaciones incluyen un plan de prejubilaciones para los mayores de 54 años, con un complemento hasta el 90% del salario neto hasta los 63 años; un plan de rentas para los empleados entre 50 y 54 años que incluye un complemento hasta el 75% del salario neto hasta los 61 años; y para los menores de 50 años, propone una indemnización de 60 días de salario por año con un máximo de 42 mensualidades, y la posible recolocación laboral en caso de encontrar una alternativa industrial.
En este sentido, Frank Torres ha asegurado que por ahora "las opciones de reindustrialización reales no existen hoy en día, solo hay algunas intenciones", pero en todo caso ha advertido que algunas de ellas están supeditando sus decisiones a que "exista paz social".
Nissan se compromete al mantenimiento de la actividad industrial hasta 31 de diciembre de 2021; a garantizar el empleo hasta el 31 diciembre de 2020 y a crear una comisión junto con los representantes de los trabajadores para explorar "fórmulas para gestionar el excedente de personal motivado por las bajas cargas de trabajo sin medidas traumáticas, a lo largo del ejercicio 2021". Además de la creación de una mesa -con participación de las Administraciones- para buscar alternativas a la reindustrialización de las plantas.
Las diferencias
Los sindicatos, entre otras cosas, consideran insuficiente la salida para los trabajadores que no pueden acogerse a las prejubilaciones y plantean que las indemnizaciones se eleven a 60 días, sin tope de mensualidades, y con una paga lineal de 30.000 euros. E insisten en tener más garantías sobre la posible recolocación en caso de encontrar una alternativa para la reindustrialización de las plantas.
El comité de empresa asegura que la última reunión con la dirección ha seguido la tónica del "inmovilismo" y la "rigidez" sin entrar de lleno en la negociación. Recuerdan, en su último comunicado, que siempre han creído "que un acuerdo era posible y lo han intentado hasta el final" y emplazan a los trabajadores a mantener la unidad y ha definir las actuaciones de la estrategia a seguir durante la asamblea de este sábado.
Según la empresa, las diferencias se concretan en todos los tramos de indemnizaciones económicas. El director de operaciones de Nissan ha explicado que la propuesta de los sindicatos para los trabajadores mayores de 55 años aceptarían la propuesta de la multinacional pero quieren ampliar el tramo de afectados al colectivo de 54 años. En segundo lugar, aún variando este escalado, para los trabajadores de más de 50 y menos de 54, el comité quieren llegar a un plan de rentas que cubra el 85% del salario neto hasta los 61 años y sí incluya el abono del Convenio
Especial. Sobre esta petición, Frank Torres señala que supondría sumar "decenas de millones de euros" al coste total del ERE, del que no ha querido concretar la cifra resultante.
Y respecto a los empleados de menos de 50 años la diferencia sería que la plantilla solicita 60 días por año, sin tope de mensualidades, y sumar un lineal de 25.000 euros por empleado. La dirección alega que en esta categoría está el grueso de la plantilla, unas 1.500 personas, y que el coste es también elevadísimo.