Josep González (Pimec): "Las cámaras de comercio invadirán competencias de los agentes sociales en Cataluña"
- "El destino de los fondos europeos ha de reactivar el tejido económico, no podemos permitir 'fantasías', porque la economía está en la UCI"
María Teresa Coca
Barcelona,
En marzo de 2019 desde la presidencia de la organización empresarial de pymes consiguió, tras años de litigio, que Pimec y Foment del Treball se repartieran a partes iguales la representación empresarial en la mesa de interlocución con la Generalitat. Y los poco más de 2 millones de euros que la Administración autonómica inyecta en las organizaciones patronales por esa presencia en las mesas de diálogo. Ahora, el Govern acaba de otorgar 2,5 millones a las cámaras de comercio catalanas y ultima un proyecto de decreto ley para regular su representación institucional.
¿Qué opina de la decisión de Torra?
Esperamos que solo se trate de un despropósito. No es solo la aportación de unos recursos que se justifican como ayudas por el impacto del Covid-19, pero que no van por esta línea, porque todos sabemos que es para mejorar la cuenta de resultado de las cámaras catalanas en una situación económica débil, cosa que no celebro. Pero hay otras razones mucho más importantes a las que nos oponemos patronales y sindicatos.
¿Y cuáles son?
Desde que un nuevo mandato se ha apoderado de la Cambra de Comerç de Barcelona lo que se persigue es una expansión de su representatividad invadiendo el terreno de los agentes sociales. Foment del Treball y Pimec ya hemos presentado alegaciones en contra del proyecto de decreto que otorgará a las entidades camerales el papel de representatividad de las empresas, algo que corresponde por ley a las organizaciones empresariales. Lo que supone una invasión de competencias a los agentes sociales.
¿Lo atribuye al actual 'color' político de la Cambra de Comerç de Barcelona, que preside Canadell?
No es difícil hacer determinadas lecturas. Que cada cual haga la suya.
Mientras, Torra pide a los empresarios que se sumen a su política contra el Gobierno...
En las reivindicaciones que sean justas, nosotros estaremos al lado del Govern. Es cierto que Cataluña tiene una financiación insuficiente en función de su PIB, hay un retraso en los compromisos de inversión en infraestructuras... y hay unanimidad en reconocerlo y denunciarlo. Pero en otros aspectos deberíamos hablar sobre cuál es la mejor forma de reclamar a Madrid, porque no creo que haya más fórmulas que la del diálogo.
Pimec está en la comisión para la reconstrucción, ¿cómo valora las líneas generales del plan aprobado?
En líneas generales nos parece correcto, pero ya entraremos en detalle cuando se concrete. De entrada, vemos muy positivo el acuerdo de la UE, aunque se hayan rebajado un poco las ayudas, pero es muy positivo sobre todo que tengan una supervisión sobre su destino, porque todos los fondos deben ir a la reactivación de la economía y a salvar el máximo de tejido económico y de empleos. Lo que no debe es ir a fantasías de construir nuevas autopistas, AVE no rentables... La economía española y catalana está en la UCI y necesita tratamientos específicos.
Pero, ¿qué echan en falta en las ayudas para apaciguar el impacto Covid?
El Gobierno debería poner en marcha unas bonificaciones para que las empresas, especialmente las pymes, hagan voluntariamente ampliaciones de capital. La situación es suficientemente dura como para que las empresas deban reforzar su financiación o sus recursos propios. También esperamos que se endurezca el régimen sancionador contra la morosidad, porque hay empresas que pagan a 180 días cuando la ley establece 60 días, aunque haya que ir contra determinados intereses. Y sería necesario fomentar la relocalización de las producciones para que se aproximen a España o a países low cost pero cercanos como Portugal, Marruecos...
¿Cómo ve el futuro de la industria?
El sector industrial ha demostrado una vez más ser un elemento esencial para la reactivación. Y hay que apostar por él. En 2000, un 18,7% del PIB español era industrial; en 2019 ha caído al 16%, cuando Europa sitúa la media en el 20% y países como Alemania tienen un 25%. Y le agravio es más si nos fijamos en el País Vasco, que aspira a tener el 45%.
¿Pasa por un cambio de modelo productivo?
Pasa por potenciar la industria con una clara apuesta por la innovación y la investigación, que son partidas presupuestarias de las administraciones que no deberían cuestionarse en ninguna circunstancia.
¿Espera que los presupuestos estatales y catalanes lo recojan?
Los presupuestos deberán replantearse su alto contenido social, reconduciendo los de 2020 y para el próximo ejercicio partir de un presupuesto base. Hay que reducir aquellos gastos que en otros años eran recurrentes y que ahora se tienen que poner en cuestión y anularlos si es necesario. Si son partidas sociales que pueden tener un coste político, de gobierno. Y los presupuestos estatales, igual, hay que hacerlos en clave UCI, no pueden ser continuistas porque a lo único que nos llevaría es a una mayor presión fiscal.
¿Sus quejas sobre los impuestos?
Las pymes pagan casi el doble de impuesto de Sociedades que las grandes empresas, por ejemplo. En cualquier caso, la política fiscal hay que diseñarla ahora en clave postcovid y teniendo en cuenta que las pymes no pueden soportar más presión fiscal para su viabilidad. En este país nos llenamos la boca de hablar de las pymes pero no a fomentar las pymes. No ha habido líneas específicas para las pymes. Se han abierto las líneas ICO, pero si se hubiesen liberado los 120 millones que deben las grandes empresas a sus proveedores, las pymes no hubiesen tenido que recurrir al endeudamiento con los créditos ICO y se ahorrarían los gastos de los intereses de los préstamos.