Castilla y León

La receta de Cascajares para conquistar Norteamérica: "No es tanto hablar inglés como pensar en americano"

    Alfonso Jiménez, fundador de Cascajares


    Más de medio centenar de empresarios han participado en una jornada empresarial organizada pr la Asociación para el Desarrollo de la Empresa Familiar de Madrid (ADEFAM) y Empresa Familiar de Castilla y León (EFCL) para explorar las posibilidades de negocio en Estados Unidos y Canadá. Durante el encuentro han podido conocer de primera mano la experiencia de las empresas españolas Alibérico y Cascajares en esos países.

    Esta iniciativa forma parte del ciclo de desayunos internacionales iniciado en octubre con una sesión sobre Colombia. Con este ciclo, las dos asociaciones pretenden que aquellas empresas que estén pensando en establecerse en estos mercados cuenten de antemano con la orientación de otras firmas que les precedieron en ese proceso y puedan aprender de sus éxitos y también de sus errores.

    Según se puso de manifiesto en esta nueva jornada, la inversión directa de España en Estados Unidos representó en 2014 la cifra de 52.000 millones de euros, lo que nos sitúa como el noveno país con más inversión en ese país. En cambio, las exportaciones a la región representan solo un 4% del total, lo que indica la existencia de un amplio margen de mejora.

    El presidente del Grupo Alibérico, Clemente González Soler, y de Cascajares, Alfonso Jiménez, presidente también de EFCL, valoraron de esos mercados el atractivo de su tamaño, en conjunto más de 300 millones de consumidores, y recomendaron a las empresas que estén pensando en esos destinos proceder a realizar una investigación profunda antes de realizar ninguna inversión, al tiempo que subrayaron la importancia de lograr formar un buen equipo con presencia de profesionales locales. Como señaló el presidente de Cascajares, "no es tanto cuestión de hablar inglés como de pensar en americano".

    Por su parte, Clemente González Soler recomendó "viajar y conocer in situ los mercados", una tarea dura que se ve recompensada en "un país que respeta a los empresarios y valora mucho su historia". A juicio del empresario, las tres claves a tener en cuenta en todo proyecto internacional son: las ideas, el diseño de la financiación de la inversión y las personas. "Tener la capacidad de crear talento y lograr que las personas involucradas en el proyecto compartan la visión y la cultura de la empresa, resulta fundamental para imprimir velocidad de crecimiento a los proyectos", aseguró.

    El presidente del Grupo Alibérico, presente en Estados Unidos desde 2012 con una fábrica en el estado de South Carolina, justificó la elección de este emplazamiento por el hecho de concentrarse en la costa Este de los Estados Unidos el 75% del PIB del país, disponer de uno de los puertos con mayor actividad comercial en el Atlántico, el de Charleston, con unos costes logísticos muy competitivos, y una legislación fiscal y laboral muy favorables para la actividad empresarial. Además, valoró "la cercanía, eficacia y agilidad de una Administración que se siente muy cerca a las empresas", aseguró.

    Explicó que la compañía optó por la compra de una empresa local como modo de establecerse en el mercado industrial estadounidense, aconsejó a las empresas emplear servicios de consultoría locales, sobre todo en materia de impuestos, y optar por un sistema de distribución híbrido, que combine personal propio y agentes especializados. En relación con la faceta comercial, elogió de Estados Unidos la facilidad para acceder a la información comercial, "muy potente y ordenada y al alcance de cualquier empresa".

    Entre los escollos más importantes de ese mercado, señaló la financiación del circulante. "Obtener crédito de un proveedor es muy difícil, al igual que lograr financiación de los bancos". Para el empresario español, además de tener un proyecto sólido, lo más importante para conseguir financiación es estar en disposición de acreditar un historial impecable de cumplimiento de todas las obligaciones con los proveedores.

    Por su parte, el presidente de Cascajares, expuso su experiencia en la creación de una planta en Canadá, en la región de Quebec, "el proyecto más apasionante y acertado que he hecho en mi vida, y también el más complicado que me he visto en la tesitura de acometer", aseguró. Alfonso Jiménez explicó que inició su aventura norteamericana en 2007 con el propósito de replicar el éxito obtenido en España con el capón de cascajares. "El objetivo que nos propusimos fue desembarcar en un mercado que consume en un solo día, coincidiendo con Acción de Gracias, 48 millones de pavos asados", explicó.

    Al final, se decantaron por Canadá, y en concreto por Quebec, por su parecido con Europa y su proximidad con el gran mercado norteamericano de la costa Oeste. Cascajares Canadá nació en 2008, tras la realización de un profundo estudio de mercado y el apoyo del Gobierno de ese país en el diseño comercial del proyecto.

    Alfonso Jiménez recordó que el reto de formar un buen equipo de trabajo les llevó seis años y que fue mucho más difícil que conseguir financiación. Cascajares y Jose Andrés sellaron un acuerdo en los años 2012 y 2013 para la comercialización del Pavo de Acción de Gracias con la receta del chef de la familia Obama. Jiménez asegura que el contacto con ese mercado le ha hecho mucho más innovador, al proporcionarle ideas que puede desarrollar en Europa.

    La jornada contó con la participación del embajador de Canadá en España y Andorra, Jon Allen, quien recordó que Canadá es el mejor país del G20 para hacer negocios (según Forbes y Bloomberg), que su economía es la que mayor crecimiento ha experimentado de todo el G7 en la última década. Asimismo, explicó que su sistema financiero es el más seguro del mundo, según valoran varias instituciones, y que el coste general para las empresas es también el más bajo de los países desarrollados.

    El acto se cerró con la intervención del consejero comercial de la Embajada Estados Unidos en España, Robert Jones, y de la socia de Columbus Global Solutions, Mónica Martínez.