Castilla y León

"Cuando estudias una carrera es el mejor momento para emprender"



    Estudiar una carrera universitaria no sólo es el camino para adquirir una buena formación, sino que puede ser la mejor oportunidad para desarrollar el espíritu emprendedor. Eso es lo que persigue la Factoría de Proyectos, una iniciativa impulsada por el profesor de la Universidad de Valladolid Víctor Valverde y que pretende convertir la educación superior en un espacio en el empiecen a probar suerte aquellos estudiantes que tienen madera de empresarios.

    Y no son pocos, porque si se aplican las estadísticas que apuntan a que, entre un 4 y 5 por ciento de la gente que está en el mercado laboral termina montando su propio negocio, sólo en la Universidad de Valladolid "hay 1.200 potenciales empresarios agazapados", explica este profesor de Economía Aplicada. "Nuestro mensaje es que los años de carrera son estupendos para diseñar tu futuro profesional, e ir empezando a perfilar un proyecto, de manera que cuando acabes los estudios tengas un puesto de trabajo en tu propio proyecto. Es algo que puede dar un sentido nuevo a tus estudios".

    La iniciativa parte de la base de que la universidad ofrece el mejor entorno y el mejor momento para que emerjan los futuros empresarios. "Están en contacto con gente conocedora de distintas disciplinas, con compañeros con tus mismas inquietudes con quienes puedes sentarte a discutir ideas, a buscar socios y equipos.

    Además no hay cargas familiares, no hay hipotecas, es el único momento vital en el que puedes hacer un proyecto vital sin agobios, sin prisas. Y es una época que cuando pasa no vuelve", explica.

    Junto a Valverde, participan en esta iniciativa el director gerente de Empresa Familiar, Eduardo Estévez, el director de la Fundación para la Excelencia Empresarial (Fundación EXECyL), y el asesor fiscal y financiero Ricardo Nieto.

    La Factoría de Proyectos se presenta como una aceleradora en la que se ofrece a los promotores de proyectos contactos con empresarios consolidados de su sector; acceso a mentores y a business angels o contactos con agentes institucionales dedicados a la promoción económica y empresarial.

    "En los próximos 10 años la oferta pública de empleo público va a ser escasísima. Ser funcionario es una posibilidad descartada. En el ámbito privado las empresas están recortando sus plantillas. Y aunque venga la recuperación en uno, dos o tres años, las empresas que sobrevivan no van a poder generar todos los empleos que se necesitan. Habrá que reponer las 400.000 empresas que han desaparecido y quienes tienen más probabilidades de éxito son los que tienen formación, universitarios y estudiantes de FP. No va a quedar otro remedio. Estamos en un momento histórico".

    Valverde advierte que el emprendimiento no es un coto abierto a todo el mundo. "Lo de llamar indiscriminadamente a emprender me parece éticamente poco serio porque requiere de una personalidad y naturaleza especial. Si fracasas con 24 años, tienes toda la vida por delante. No todo el mundo puede emprender, deben hacerlo fundamentalmente los jóvenes. Y para hacerlo hay que destinar tiempo para diseñar el proyecto y para que comience a funcionar. Son tres o cuatro años, que es el tiempo que estás estudiando".

    Pero ser joven y universitario tampoco basta. "Decimos a la gente lo que hace falta: que la idea de montar tu propio negocio te ilusione y te encienda, si no, no es para ti. Que los ambientes de incertidumbre no le provoquen naúseas, que sea capaz de aguantar la presión. Y si los dos primeros aspectos te fallan tienes un salvoconducto que es el de ser un luchador".

    La iniciativa está naciendo con éxito. "Estamos muy contentos. Se está provocando un efecto de retroalimentación muy bueno". Otra prueba es que se ha hecho un pequeño concurso en el que cada participante plantee en cinco minutos su proyecto. El 75 por ciento de los participantes se va a presentar.