La internacionalización, una necesidad para crecer
De entre las escasas buenas noticias que nos ofrece la difícil situación económica que atraviesa España, debemos subrayar la evolución positiva de nuestro comercio exterior y de servicios, y su aportación neta al conjunto de la economía nacional. Sin este dinamismo del sector exterior, la recesión sería aún mucho más profunda.
El incremento de las exportaciones y, por ende, la mejora de la balanza comercial, no se debe exclusivamente, aunque también, a la compensación del fuerte descenso de la demanda doméstica y del consumo de las administraciones públicas, sino que es consecuencia directa del enorme esfuerzo que están haciendo las empresas por recuperar parte de la competitividad perdida durante nuestro pasado reciente.
Son indudables los beneficios que, desde la óptica macro y microeconómica, aporta la internacionalización: hace a las empresas más resistentes a los ciclos económicos y menos vulnerables a la crisis, les permite acceder a mercados más amplios; mejoran su eficiencia de costes, diversifican sus riesgos comerciales y obtienen mayores y mejores resultados.
En definitiva, las empresas crecen y con ellas, la economía nacional. Por ello, la salida al exterior, la participación en otros mercados, ha pasado de ser una opción a un requisito de supervivencia y una alternativa ante la recesión, tanto para las grandes empresas como para muchas pymes y autónomos.
Ya son 37.000 empresas españolas las que, según datos del ICEX, exportan con carácter regular -de las que más de 4.500 corresponden a la Comunidad de Castilla y León. Sin embargo, es preciso incrementar nuestro esfuerzo en esta materia: Primero, porque nuestras exportaciones siguen estando muy concentradas en los mercados excesivamente maduros, como la Unión Europea, y segundo, porque desaprovechamos las oportunidades que se generan en los mercados emergentes, con ritmos muy superiores de crecimiento a los del entorno europeo.
Así las cosas, es imprescindible seguir apostando por la salida al exterior de las empresas y, en este sentido, Castilla y León tiene un enorme potencial. En estos momentos, la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale) está trabajando de forma conjunta y coordinada con la Junta de Castilla y León, el ICEX y el Consejo Regional de Cámaras de Comercio e Industria, en la articulación del nuevo Plan para la Internacionalización Empresarial de Castilla y León 2013-2016; un documento que representará una magnífica oportunidad para las empresas ajustándose a las necesidades reales de hoy en día.
La Confederación, consciente de su importancia, apuesta de forma decidida por la cooperación empresarial y sus alternativas, entre otras, incrementando las capacidades y competencias en la empresa, mejorando su posición competitiva a través del acceso a un mercado, en definitiva apoyando su expansión internacional.
Y es que la decisión de salir al exterior se ha de contemplar como una parte vital de la estrategia empresarial. Desde este convencimiento y gracias a su Plan de Internacionalización, Cecale continuará trabajando para ayudar a las empresas a negociar e implantarse en el exterior, así como a atraer capital extranjero.
En este 2013, y tras un análisis del mercado internacional, ha fijado sus prioridades en Ecuador y, por ello, ha organizado para el próximo día 12 de marzo un encuentro con la embajadora de este país en España, para conocer de primera mano las oportunidades de inversión y coordinar la misión empresarial que la Confederación está preparando para finales del próximo mes de mayo.
SANTIAGO APARICIO
Presidente en funciones de la Confederación de Organizaciones Empresariales de Castilla y León (Cecale)