Castilla y León

Carta a 37.000 sanitarios para convencerles de las bondades de sus "sacrificios" laborales

    Antonio Sáez, consejero de Sanidad


    El consejero de Sanidad, Antonio Sáez, ha enviado una carta a los 37.000 sanitarios de la Comunidad para convencerles de las bondades de los sacrificios laborales que se pide a este colectivo

    En su misiva, el consejero de Sanidad afrima que "la economía y la sociedad de Castilla y León viven momentos de gran dificultad. También la sanidad pública".Tras recordar que la sanidad ha sido una de políticas prioritarias para la Junta de Castilla y León, "que ha asignado recursos crecientes al sector sanitario hasta representar hoy casi el 35% de todos los presupuestos del Gobierno", Saenz Aguadpo destaca que "entre todos hemos sido capaces de construir un sistema público de salud de calidad acreditada y con muy buena valoración por parte de los ciudadanos" y en este apunta que la Comunidad es en la que más se ha incrementado el índice de satisfacción, según los informes del Ministerio de Sanidad.

    En estos años -continúa- se han incorporado 7.500 profesionales más a Sacyl y se han renovado de forma importante las infraestructuras y la dotación tecnológica de nuestros centros sanitarios.

    Sin embargo, el consejero recuerda que "las cosas han cambiado. El Gobierno de la Nación nos transfiere muchos menos recursos y recaudamos menos ingresos propios. Además, tenemos la obligación de cumplir los objetivos de déficit, lo que limita nuestras posibilidades de endeudamiento. Tenemos que reaccionar ante esta situación. La sanidad tiene que continuar siendo una prioridad política, pero también debe contribuir a la contención del gasto público."

    El máximo responsable sanitario de Castilla y León relata que la Junta de Castilla y León adoptó, el pasado mes de diciembre, diversas iniciativas incluidas en el Proyecto de Ley de Medidas, la prórroga de los presupuestos de 2011 y el Plan de Racionalización del gasto corriente. para compatibilizar el mantenimiento de la calidad de la sanidad pública y de otros servicios esenciales, y cumplir con los objetivos de déficit. "Se trata de medidas que considero equilibradas", pues exigen el esfuerzo de todos. De los ciudadanos, con el denominado "céntimo sanitario" y la recaudación del impuesto sobre el patrimonio; de algunas empresas, con nuevos impuestos; de la propia Administración, con un compromiso de seguir adelgazando su tamaño; y de los empleados públicos, con una mayor dedicación horaria a su trabajo al tiempo que se mantienen sus retribuciones.

    Tras calificar la propuesta de "razonable", recuerda que en otras Comunidades se han cerrado centros de salud o unidades hospitalarias; que han disminuido las retribuciones a sus trabajadores incluidos el complemento de carrera profesional (hasta en un 50%) o el precio de las guardias; o que se ha despedido a trabajadores de la sanidad pública. "En Castilla y León hemos optado por mantener las retribuciones pero reclamando una mayor dedicación horaria".

    Añade que la forma en que podamos concretar la ampliación de la jornada de las actuales 35 horas semanales a 37,5 en la sanidad se está negociando con los representantes de sus trabajadores; en la Mesa Sectorial y mediante contactos y reuniones con cada una de las organizaciones sindicales. En lo fundamental proponemos que en los hospitales quienes tienen horario de mañana trabajen dos tardes y/o una mañana de sábado (10 horas) cada mes en su actividad asistencial ordinaria (consultas o quirófano); quienes trabajen a turno verían ampliada su jornada anual sin modificar sus condiciones actuales.

    El consejero desmiente expresamente algunas afirmaciones que, "probablemente por el fragor de la campaña ante las inminentes elecciones sindicales, no responden a la realidad". Así niega que se vaya a despedir a "cientos de trabajadores" o a utilizar las horas adicionales para reducir las de las guardias hospitalarias. Tampoco se va a hacer trabajar a nuestros los facultativos salvo que estén de guardia.

    La carta concluye que "podemos cerrar los ojos y mirar hacia otro lado. Pero eso no resolverá nuestros problemas ni los de una sanidad pública de hoy pero también de mañana".