Castilla y León
Mañueco e Igea rechazan cualquier crisis en su coalición: "Es un gobierno para cuatro años"
- Igea asegura que los "roces" han cohesionado el Ejecutivo regional
- Fernández Mañueco garantiza que habrá presupuestos regionales el próximo año
- Defienden que es un "Gobierno solidario que trabaja a pleno rendimiento"
Rafael Daniel
Valladolid,
El presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañeco, y su vicepresidente Francisco Igea han comparecido este jueves para espantar cualquier imagen de crisis. "Es un gobierno para cuatro años" han coincidido sobre un Ejecutivo que comparten PP y Ciudadanos y al que "los roces han cohesionado".
"Ni rivalidad, ni trampas internas ni falta de cohesión". Los "riesgos" que tiene una coalición de gobierno, según el vicepresidente Francisco Igea, no han anidado en el Ejecutivo que PP y Ciudadanos mantienen en la Junta de Castilla y León.
Más bien, todo lo contrario. Durante los tres meses de cohabitación, ambos partidos "hemos conseguido demostrar las múltiples ventajas de combinar "experiencia y empuje": competencia interna por "ser los mejores", mayor control interno y "amplitud del mensaje". Es más, los "roces de trabajo" han hecho posible "aumentar la cohesión", ha dicho Igea.
Fernández Mañueco y Francisco Igea han defendido su Gobierno "solidario" que trabaja a "pleno rendimiento" para transformar Castilla y León en estos cuatro años con políticas moderadas, centradas y liberales basadas en el diálogo.
Durante la presentación conjunta del balance de estos primeros cien días de Gobierno de coalición entre PP y Ciudadanos, ambos afirmaron que se complementan "perfectamente" y que las decisiones de gobierno de adoptan de manera cohesionada y siempre desde "el interés general".
El presidente de la Junta ha sido claro al asegurar que "es un Gobierno para cuatro años", algo que también ha ratificado Igea tras "la buena experiencia" de estos meses.
"Pon amor y recibirás amor"
Ante las declaraciones polémicas de Igea o el hecho de que iniciaran la legislatura definiendo la coalición como un "matrimonio de conveniencia", Fernández Mañueco ha afirmado que se complementan "perfectamente" y ha resaltado como virtud su carácter de "ambicionar siempre mejorar las cosas", algo que le ha "enriquecido". "Donde no hay amor pon amor y recibirás amor", ha dicho el presidente citando a San Juan de la Cruz.
Igea también ha negado divisiones en la ación de gobierno ya que se siente respaldado por el presidente y las decisiones se adoptan de manera conjunta. "Es un Gobierno conjunto, de dos partidos, del Partido Popular y de Ciudadanos, para lo bueno y para lo malo", ha puntualizado Fernández Mañueco, que subrayó que prima el "interés general" de Castilla y León y en España se podría hacer algo "de similares características", en relación a una acuerdo de los partidos constitucionalistas en Madrid para evitar el pacto PSOE-Podemos.
Tras subrayar que el Consejo de Gobierno ha tratado 420 asuntos, movilizado 1.000 millones, iniciado la tramitación de trece leyes y en marcha el 80 por ciento de las cien medidas acordadas, Fernández Mañueco puso en valor que se trata de un Ejecutivo que apuesta por el diálogo en todas sus vertientes, por el crecimiento económico y la creación de empleo, por la garantía de los servicios públicos, la atención al mundo rural ante el reto demográfico y por una política fiscal "inteligente" de reducción de impuestos.
El vicepresidente, también consejero de Transparencia, Ordenación del Territorio y Acción Exterior, aprovechó la rueda de prensa para defender "la verdad y la libertad" como principios de la gestión pública y para destacar que "se diga la verdad" sobre las listas de espera, que se mejore la evaluación de las políticas públicas, que se reforme la atención primaria o que se apruebe una ley de derechos y garantías.
Además, Fernández Mañueco ha garantizado que el próximo año habrá nuevos presupuestos en los que ya trabajan intensamente, aunque ha matizado que están pendientes de la conformación de un nuevo Gobierno central para conocer el techo de gasto y recibir los fondos de la financiación autonómica para poder concretar las cuentas de la Comunidad.