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Mercado de renta fija: ¿cómo afrontar los desafíos sostenibles?


    Ana Delgado

    En el contexto actual de renta fija, donde el perfil de rentabilidad es asimétrico y los riesgos inherentes, comprender la solidez de los emisores se vuelve crucial. Más allá de la tradicional evaluación del gobierno corporativo, las tendencias recientes de inversión en renta fija han incorporado elementos ambientales y sociales, gracias al crecimiento exponencial de datos disponibles.

    En este aspecto, discernir lo esencial para garantizar que los emisores cumplan con sus obligaciones de deuda es una tarea crucial de los inversores, a pesar de la complejidad añadida por la integración de factores no financieros.

    ¿Cómo lo afronta MFS?

    Un ejemplo destacado de cómo abordar estas complejidades es el enfoque adoptado por el fondo de inversión global MFS. La empresa no sólo integra de manera activa los factores de sostenibilidad en sus decisiones de inversión, sino que también se involucra activamente con las empresas en las que invierte. Este proceso incluye una evaluación exhaustiva de la sostenibilidad a lo largo del tiempo, lo que implica un compromiso constante con los equipos directivos para comprender mejor su enfoque hacia los aspectos ambientales, sociales y de gobierno corporativo (ASG).

    La clave para desentrañar esta complejidad radica en formular las preguntas adecuadas a los equipos directivos de las empresas. Dado el tiempo limitado de los inversores en renta fija para interactuar con los emisores, este enfoque implica escuchar atentamente y aplicar el conocimiento adquirido en las decisiones de cartera.

    A este respecto, la tesis de inversión debe evolucionar a medida que se considera cómo el emisor responde a diversas cuestiones a lo largo del tiempo, generando un proceso iterativo de mejora continua.

    Prepararse para los imprevistos

    A lo largo de la historia, el sector de defensa europeo ha enfrentado desafíos debido a su asociación con actividades consideradas socialmente insostenibles. (El Estudio europeo sobre ISR de 2018 determinó que el 63,6% de los inversores de la Unión Europea excluían las "armas controvertidas", mientras que la cifra era del 45,7% en el caso de "todas las armas").

    Sin embargo, tras eventos geopolíticos recientes, como la invasión de Ucrania, se observa un cambio de actitud. Y es que, a medida que varios países aumentan sus presupuestos de defensa, algunos inversores reconsideran su enfoque excluyente hacia el sector de defensa, reconociendo su papel esencial en la protección y prosperidad, así como su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU.

    Implicación activa y cambio de mentalidad

    Un ejemplo tangible de esta transformación es la revisión de las recomendaciones de crédito para un fabricante europeo de sistemas y dispositivos electrónicos en el sector de defensa. Ante la escalada de la crisis en Ucrania, un analista de MFS reevaluó las perspectivas, documentando una opinión a largo plazo con matices adicionales sobre los factores ASG en este sector.

    La compañía implementó medidas para mejorar sus credenciales de sostenibilidad, incluyendo cambios en el gobierno corporativo y prácticas anticorrupción. Con un equipo directivo comprometido, se espera que estas mejoras mitiguen las deficiencias previas, posiblemente conduciendo a un desempeño a largo plazo más sólido.

    En este sentido, MFS confía en que estas iniciativas, combinadas con una estrategia clara, contribuirán a mitigar las deficiencias en el gobierno corporativo, transformando la percepción sobre la sostenibilidad de la empresa. Dados los cambios económicos para las empresas de defensa y las mejoras en sostenibilidad, la compañía podría experimentar un rendimiento sólido a medio y largo plazo. Por tanto, los inversores deben permanecer atentos a cómo las consideraciones de sostenibilidad evolucionan en sus decisiones de inversión.

    Producido por EcoBrands.