Los jueves de la ciberseguridad: '¿Es seguro el Metaverso? ¿Cómo proteger el avatar?'
- Ofrecido por HP Wolf Security
EcoBrands
Madrid,
"La seguridad en el metaverso dependerá de cómo lo utilicemos y de qué medidas tomemos para protegernos". Enrique Serrano, fundador y CEO de Hackrocks, jefe de seguridad de Cisoverso y miembro de Mundo Hacker, junto con Melchor Sanz, director de Tecnología e Innovación de HP, analizaron cuáles son las mejores formas para protegerse en el metaverso. Estos y otros temas relacionados se trataron en "Los Jueves de la Cibeseguridad", un espacio de 'social audio' de elEconomista y HP Wolf Security que acoge Twitter Spaces todos los jueves entre las 18:30 y las 19:00 horas y que posteriormente se ofrece a través de las principales plataformas de podcast.
Los avances del mundo tecnológico y digital han permitido entender el metaverso como algo cotidiano y lleno de ventajas. Sin embargo, no es todo oro lo que reluce. Esta transformación, acelerada especialmente en los últimos meses, está llena de peligros y amenazas: malware, hacking, fishing tradicional o incluso la usurpación de la identidad. "Cuanto más incómodas sean las medidas de seguridad que tomemos para acceder al metaverso, a algo tan importante como puede ser reemplazar nuestro ser en un mundo virtual, más seguro será", apunta Enrique Serrano.
Respecto a las principales amenazas de este nuevo universo online, Serrano confiesa que la "usurpación de la identidad de otra persona es de las más sencillas" y se lleva a cabo simplemente porque consigues o copias el avatar de otra persona. También destaca la propia seguridad del metaverso, es decir, "en qué lugar vamos a proporcionar nuestros datos". Para ello, Serrano aconseja realizar un ejercicio de investigación previo para conocer los detalles de los proveedores a los que les damos la información.
Melchor Sanz considera que uno de los pasos más importantes a la hora de introducirse en el metaverso es la identificación, con multi factor huella o datos biométricos, entre otros sistemas. Para ello, es imprescindible "contar con doble factor o incluso triple factor al entrar en el metaverso y así garantizar que yo soy yo y que tú eres tú". En este sentido, para Serrano tiene un papel fundamental "la veracidad de la información que se transmite y la responsabilidad de cada usuario".
En este sentido, HP pone a disposición de los usuarios una serie de elementos y herramientas para alcanzar la máxima seguridad en el metaverso. Melchor Sanz hace hincapié en el uso de los sistemas de reconocimiento facial, de huella digital, de patrón numérico y, de esta forma, "poder garantizar que todos estos datos se envían de forma cifrada al destino y que sea el metaverso el que genere un token de doble factor que se tenga que meter con el móvil para aumentar la seguridad", apunta Sanz. Una de las herramientas más recomendadas de HP son las gafas, con las que el usuario podrá vivir la auténtica experiencia del metaverso.
Los expertos también trataron en este espacio radiofónico la importancia que tiene conocer las reglas del juego y asumir que el vacío legal con el que convive el metaverso puede ser un arma de doble filo. "Un avatar como tal no está reconocido ahora mismo ni en el Código Civil ni en el Código Penal de ningún país, por eso hay que crear una especie de argumentario que ayude a defender los principios y las identidades de las personas", manifiesta Sanz.
En definitiva, Serrano aconseja a todas las personas que quieran introducirse en el metaverso que busquen algo más que un usuario y una contraseña "cuando algo es más cómodo, es que es inseguro y viceversa, cuando cuesta mucho entrar es probable que tenga más medidas de seguridad". Por su parte, Melchor Sanz recomienda que el dispositivo a la hora de entrar en el metaverso sea de una marca reconocida, como HP, y que además "tenga un sistema férreo de aislamiento contra amenazas desconocidas, como es el caso de Wolf Security". Sanz concluye afirmando que, de entrar en un metaverso, se haga en uno reputado, reconocido y que lleve tiempo en el mercado.