Banca y finanzas

Sin tope en los depósitos: los bancos vuelven a pagar el 3%

  • Popular y Bankinter son las primeras entidades en saltarse el máximo fijado
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Después de nueve meses de obediencia y control, la banca empieza a saltarse el tope de rentabilidad impuesto por el Banco de España sobre los depósitos. Las primeras entidades en ofrecer unos tipos de interés por encima de la recomendación del supervisor han sido Popular y Bankinter.

Ambas han lanzado en las últimas semanas campañas para atraer y retener clientes con las tasas más atractivas para el mercado. Eso sí, con algunas condiciones. Popular remunera a doce meses el dinero de sus actuales clientes al 3%, frente al 2% fijado por el organismo que gobierna Luis María Linde. Por su parte, Bankinter acaba de lanzar una imposición al 3% a trece meses, con los que la rentabilidad anual se sitúa en el 2,77% para nuevos clientes por la entrega de un mínimo de 10.000 euros. Exige, además, la domiciliación de la nómina.

En el sector se da por hecho que a partir de ahora se ha abierto la veda para pagar más por el dinero captado, pero que en ningún momento se llegará a los niveles del pasado ejercicio, de más del 4%, y que será a través de campañas recurrentes puntuales.

El objetivo de Popular y Bankinter es diferente. El primero intenta fidelizar, es decir, evitar la fuga del ahorro que vencía ahora de la comercialización del llamado Depósito Gasol en septiembre del ejercicio pasado. Para los nuevos clientes, la entidad paga entre un 2% y un 2,5% con plazos superiores a los catorce meses, dentro del baremo no penalizado por el Banco de España.

En el caso de Bankinter la oferta va dirigida al dinero entrante, en contra de su competidor. Su promoción terminará a finales de octubre o en el momento en que se cubra la previsión de obtener 50 millones.

Para los clientes actuales, la entidad que dirige María Dolores Dancausa ofrece un 2%, en la banda recomendada por el organismo de Linde.

La limitación en los tipos de los depósitos causó controversia en enero. La Comisión Nacional de Competencia inició entonces un expediente para determinar si la medida iba en contra de las reglas del libre mercado.

Otros casos

Popular y Bankinter no son los únicos que han empezado a saltarse los topes. Hay entidades de menor tamaño que comercializan productos con tasas también superiores y en torno al 3%. Se trata de grupos que escapan de la penalización al operar en nuestro país a través de sucursales y depender del supervisor del país de origen de la matriz.

Es el caso del portugués Espirito Santo y el chino ICBC. El banco luso paga un 2,8% por imposiciones de más de 50.000 euros con un plazo de doce meses.

En los próximos meses y con el mercado abierto parcialmente para los bancos españoles, que tienen que ofrecer una mayor rentabilidad que sus competidores europeos, el sector se enfrenta a vencimientos de depósitos superiores a los 100.000 millones de euros, además de los relativos a las emisiones de deuda en el mercado mayorista. Si bien actualmente las entidades de nuestro país tienen más fácil acudirá a los inversores debido a la bajada de la prima de riesgo y la menor incertidumbre la situación de España. La mejora es clara, pero aún parcial.