La Fundación Unicaja reúne el jueves su patronato y forzará el cese de consejeros
- El máximo accionista del banco baraja pedir la convocatoria de junta extraordinaria
Lucía Gómez
Sigue la lucha por el poder en Unicaja. La Fundación Unicaja, máximo accionista de la entidad, reunirá el próximo jueves 15 de diciembre a sus patronos para forzar el cese de sus representantes en el consejo de administración del banco. Tal y como ha podido saber elEconomista.es, la organización que preside José Manuel Domínguez busca alinear sus cuatro sillas en el consejo con los intereses de Manuel Azuaga, actual presidente del banco, de cara a los cambios que se esperan para el próximo mes de junio. Todo ello, en un contexto en el que el Banco Central Europeo (BCE) mete presión para que este traspaso de poderes se haga de acuerdo a las normas del buen gobierno corporativo y con una separación de poderes real, es decir, dejando sin funciones ejecutivas el cargo de presidente, y presente su guion en enero.
Pero esta nueva vuelta de tuerca a la batalla interna en Unicaja viene de lejos. Los cuatro representantes de la Fundación en el consejo de administración del banco, Teresa Sáez Ponte, Manuel Muela, Petra Mateos y Juan Fraile, señalan las mismas fuentes, hace tiempo que no cuentan con la total confianza del patronato. De hecho, es importante recordar que con la propuesta de su última reelección, hace ahora justo un año, fueron varios los patronos que levantaron sus voces en contra de este movimiento, señalando que no habían podido certificar la idoneidad de los candidatos o proponer otros nuevos pese a que los cuatro independientes llevaban más de tres años en el cargo. Entonces se entendió que su posicionamiento con Braulio Medel, por aquel entonces todavía presidente de la Fundación, a favor del consejero delegado Manuel Menéndez y enfrentado a Azuaga, había provocado una situación que ahora podría terminar con su cese.
Tras una tensa última reunión en la que, señalan las mismas fuentes, los patronos habrían jugado todas sus cartas para tratar de que estos dimitiesen sin conseguirlo -incluidos apercibimientos de tinte personal, admiten-, los consejeros dominicales de la Fundación esperan un nuevo movimiento del patronato tras la reunión del próximo jueves.
Legalmente existen dos formas de forzar su salida: forzar la convocatoria de una junta extraordinaria o esperar a la de 2023, que no se celebraría hasta, al menos, abril. Si bien ambas son posibles, fuentes financieras apuntan a la primera como la más probable, ya que la Fundación quiere tener asegurados los votos para conseguir a un nuevo presidente de su cuerda antes de junio. Sea como fuere, el consejo actual sería el que votase la hoja de ruta que se envíe al BCE, pues la ley da un plazo máximo de dos meses para convocar la junta, es decir, hasta febrero, y el plazo para remitir el guion al supervisor finaliza el 31 de enero.
Lluvia de movimientos en los últimos meses
La batalla por el control del banco ha movido una y otra vez los nombres en el consejo de la entidad. Los primeros en salir, hace apenas nueve meses, fueron los independientes Manuel Conthe, Ana Bolado y Manuel González Cid, propuestos por Unicaja en la integración con Liberbank. Con el primero de estos movimientos, se dio entrada a los dueños de Mayoral a través de la figura de Rafael Domínguez de la Maza, ocupando una silla de dominical, si bien más tarde se incorporarían independientes, Carolina Martínez Caro, Isidoro Unda y Teresa Costa.