El beneficio de Caja Madrid cae un 70% y prevé que la morosidad supere un 7% en 2009
Esta caída en beneficios con respecto a 2007 se debe, principalmente, a la ausencia de los ingresos extraordinarios anotados entonces y también por la dotación a provisiones.
La caja destacó la ausencia de extraordinarios en 2007, como las plusvalías de 2.333 millones por la venta de su participación en Endesa o el beneficio de la venta del 21% de Realia.
Según informó la entidad, su morosidad se quintuplicó en 2008, ya que se situó en el 4,87% frente al 0,90% registrado en 2007, al tiempo que su ratio de cobertura para insolvencias futuras se redujo hasta el 46,6% frente al 237% de 2007, aunque la cobertura con garantía hipotecaria era mejor, del 112%.
El presidente de la caja, Miguel Blesa, pronosticó que la tasa de morosidad de la entidad superará el 7 por ciento en 2009, a tenor de las previsiones sobre el paro y la evolución económica.
Blesa explicó que la mayor morosidad proviene de los préstamos a particulares y de las hipotecas y respecto al negocio de empresas, aseguró que la morosidad es mínima.
Auguró que el resto de entidades también tendrán que afrontar aumentos en la mora, si bien descartó que el Estado vaya a tener que entrar en el capital de un banco o caja, pese a que se cuenten con las herramientas necesarias por si fuera necesario.
Para el "difícil" 2009, Blesa ha fijado entre los objetivos aumentar un 2,4 por ciento la inversión crediticia, poniendo más énfasis en el sector empresarial y menos en el inmobiliario.
La entidad ha decidido, como casi todos sus competidores, destinar parte de sus beneficios a dotaciones, en concreto 550 millones de euros.
A cierre de 2008, Caja Madrid tenía concedidos créditos a sus clientes por importe de 118.436 millones de euros, el 9,7% más que un año antes, según la caja, que destaca que el crédito a empresas mantuvo un papel "protagonista" al crecer un 16,4%, tras conceder más de 14.100 millones en doce meses.
Los créditos con garantía real, que incluyen las hipotecas, crecieron el 4%, hasta los 73.753 millones de euros, lejos de los crecimientos de anteriores ejercicios.
Blesa también anunció que a la entidad se le han adjudicado 1.320 millones en dos de las tres subastas del Fondo para la Adquisición de Activos Financieros en las que ha participado, una medida "muy oportuna y acertada".
Estos recursos, unidos a que puede emitir hasta 6.200 millones este año con el aval del Estado, y a los recursos de los clientes, le podrán servir para financiar todo el dinero que preste en 2009, por lo que, "con prudencia, pero con tranquilidad" afrontarán el año.
Respecto a la salida a Bolsa de su corporación financiera, Cibeles, reconoció que los mercados "no tiene pinta" de que se vayan a establecer en 2009, pero si "a final de año, las cosas han cambiado, nos lanzaremos al mercado, pero no de cualquier manera".
En la presentación de resultados, Blesa aseguró, sobre la normativa que debe regir los actos de la caja, que el Consejo de Administración de la entidad va a cumplir la legislación vigente "con el mismo ardor" con el que va a defender su independencia.
Explicó que en la actuación del Consejo no hay atisbo de "comportamiento rebelde ni altivo" y que dicho órgano espera que "cuanto antes" se levanten las suspensiones cautelares sobre dos miembros de la Comisión de Control de la entidad.
En cuanto a la legislación aprobada por el Ejecutivo de Esperanza Aguirre, Blesa aseguró que no va a discutir la competencia legislativa de la Comunidad de Madrid, pero añadió que "han hecho lo que quisieron hacer y con sus capacidades".