Los buenos resultados del Grupo PSA despejan el futuro de Opel en Zaragoza
Eva Sereno
Zaragoza,
La planta de Opel en Figueruelas (Zaragoza) ha aumentado su producción un 18% y espera cerrar este año con una fabricación de alrededor de 450.000 vehículos.
Opel en Figueruelas (Zaragoza) toma aire tras la presentación de los resultados del Grupo PSA, que arrojan un beneficio de 1.481 millones de euros, el 18% más, en el primer semestre de este año en términos interanuales. El dato tranquiliza en esta planta al garantizar una cierta estabilidad económica porque Opel, como filial de General Motors, estaba en números rojos de forma continuada (en Opel España se abandonaron el año pasado).
El efecto PSA –tras integrar Opel/Vauxhall-, se ha notado en la planta de Zaragoza, que el primer semestre del año ha elevado su producción un 18% en comparación con el mismo período de 2017 al fabricar 239.395 vehículos. Una cifra con la que se ha convertido en la planta del grupo en España que más coches ha ensamblado, superando así a Vigo y Madrid.
Las perspectivas son favorables porque 2018 comenzó con una previsión de 380.000 vehículos para este año, aunque recientemente la compañía la ha elevado a 440.000. De continuar sin variaciones en el mercado, se podría terminar incluso con una producción de 450.000 coches este año, que es el primero completo en el que se ensamblan cuatro modelos: el Opel Corsa, Opel Mokka, Opel Crossland X y Citröen C3 Aircross.
Además, en la planta se están acometiendo inversiones en la nave de pinturas y en carrocerías –hasta ahora era un cuello de botella importante-, para alcanzar una mayor producción y tener una línea para coches bitonos.
También ha aumentado el empleo. Se ha pasado de 15 a 17 turnos de trabajo, incorporando a cerca de 110 personas. Esta cifra podría aumentar porque, tras las vacaciones, se prevé comenzar a negociar un turno especial de fin de semana, que podría conllevar unas 600 nuevas contrataciones, según UGT.
Unas buenas perspectivas a las que se suma el lanzamiento del nuevo Corsa en 2019 y de su versión eléctrica en 2020, aunque también hay incertidumbres como el fin de la producción del Opel Mokka en 2019, cuyo volumen podría sustituirse con más carga de trabajo del Crossland X y del Aircross o con nuevas adjudicaciones de modelos sobre los que PSA no ha desvelado sus planes. De momento, Figueruelas está dispuesta a trabajar para recuperar el fruto del esfuerzo realizado por su plantilla.