Aragón

Fersa Bearings invierte en una nueva línea en Zaragoza con los avances de la Fabricación 4.0


    Eva Sereno

    La empresa está invirtiendo en una nueva línea para avanzar en la fabricación 4.0, así como en sistemas de inteligencia y gestión de la información. El centro de Zaragoza podría contar además con una nueva línea adicional con la llegada de nuevos proyectos. Fersa también impulsa su actividad en los mercados exteriores con una nueva línea en la planta de China. En este mercado asiático, se prevé multiplicar por cinco la facturación en tres años. Esta buena evolución de Fersa, que crece al 16%, coincide con la celebración de su 50 aniversario.

    Fersa Bearings, especializada en rodamientos para automoción, apuesta por la transformación digital. "Estamos convencidos de que la tecnología y la cultura van a seguir siendo los elementos diferenciales de Fersa y lo que nos va a dar una ventaja competitiva respecto a otras compañías. En 2018, continuaremos con la digitalización. Vamos a continuar nuestra inversión en sistemas de inteligencia y de gestión de la información" para lo que se va a invertir 700.000 euros entre 2027 y 2018, según ha explicado Pedro Pablo Andreu, COO de Fersa Bearing, a elEconomista.es

    Unas inversiones que se suman a los 4 millones de euros que invirtió en 2017 en aumentar la capacidad productiva y en proseguir con la digitalización. La empresa avanza así en convertir la planta de Zaragoza en una fábrica inteligente. "Formamos parte del proyecto STREAM-OD, englobado en el programa Horizonte 2020 de la Unión Europea. Invertimos en gestión de la información, modelizaciones y simulaciones virtuales de procesos y productos. Queremos usar todas las posibilidades que ofrece la tecnología para dar a nuestros clientes una propuesta de valor y una experiencia excepcionales".

    Esta transformación tecnológica de Fersa, que emplea a 503 personas, incluye inversiones en una nueva línea con todos los avances de la fabricación 4.0 en la planta de Zaragoza, que recientemente se ha ampliado con un nuevo centro logístico y con más capacidad para oficinas.

    "Hemos lanzado una nueva línea que vendrá a finales de año para un proyecto muy importante con un gran OEM europeo. Estamos en fase de negociación de ciertos proyectos que implicarían la necesidad de otra línea adicional en nuestra planta de Zaragoza", lo que podría conllevar que la empresa también tuviera que ampliar su capacidad logística.

    Estas nuevas líneas impulsarían la actividad de Fersa, que cerró el año 2017 con unas ventas del grupo de más de 72 millones de euros, lo que supone un 16% más en comparación con 2016.

    Mercados exteriores

    El crecimiento de Fersa no viene solo de la actividad de la planta de Zaragoza, sino también de los mercados exteriores. "La exportación representa la mayor parte de nuestro volumen de negocio, concretamente, más del 95% de las ventas. En España estamos ganando cuota de mercado año tras año. En los últimos cuatro, hemos triplicado nuestra facturación en el país, pero los fabricantes de vehículo pesado más importantes están fuera de nuestras fronteras".

    Los principales mercados de la compañía son USA, Alemania, Brasil y China, país este último en el que Fersa prevé un importante crecimiento. "China es un mercado muy importante para nosotros. Con los proyectos que tenemos hoy en día asignados vamos a multiplicar nuestra facturación por cinco en los próximos tres años. Nuestra idea es dedicar la planta de China a suministrar en el mercado local, cada vez en mayor medida. Tenemos proyectos con SAIC, que es el mayor OEM chino, y con varios fabricantes de ejes y transmisiones locales". Además, se están desarrollando proyectos para grandes empresas europeas y norteamericanas.

    En Brasil, la empresa también tiene importantes planes. "Brasil es un mercado clave" por el número de vehículos pesados que circulan por este país y su mayor antigüedad, lo que favorece el sector del recambio de componentes. "Tenemos en curso proyectos muy interesantes tanto para fabricantes de equipo original como lanzamientos de soluciones novedosas para los clientes del recambio".

    La empresa, que comenzó en Brasil con una oficina comercial y abrió hace dos años un centro logístico, está creciendo en este mercado "cada trimestre tanto a nivel de ventas como aprovisionamiento y necesidad de personal". Un motivo por el que no se descarta ampliar instalaciones y los servicios que se ofrecen a sus clientes.

    "El de Brasil es un proyecto -ha añadido el COO-, al igual que USA y España, que se basa en entender la necesidad del cliente. En esta línea, implementamos hace tres años el Fersa Care", que se basa en un servicio total para el mecánico con el que se pasa de vender productos a vender soluciones, servicios y experiencias. "Nuestra idea es formar a un equipo técnico local que pueda dar soporte a los clientes en Brasil".

    Aunque estos son los principales mercados, Fersa está presente en más de 85 países a través de su red de distribuidores. "Contamos con presencia en España, Estados Unidos, Brasil, Austria, China e India". Y, el objetivo es seguir creciendo también en los mercados internacionales, "lo que pasa por abrir más filiales propias en un futuro en mercados estratégicos como Europa del Este o México".

    Cincuenta años

    La base de este crecimiento y planes de futuro se asienta sobre los 50 años, que cumple Fersa, que nació en 1968 de la mano de dos talleres familiares dedicados a la fabricación de rodamientos, que se unieron para formar A & S Fersa. Durante los años 70 y 80, la empresa se modernizó y realizó una fuerte inversión en maquinaria. "Al mismo tiempo que crecía la empresa, lo hacía su nivel de negocio y el radio de acción, pasando de ser meramente local a hacerse un hueco en el mercado internacional".

    Los años 90 se centraron en la búsqueda de la máxima calidad y, posteriormente, con el nuevo siglo se apostó por los mercados internacionales y en revisar su cadena de valor. "En 2008, decidimos cambiar nuestro modelo de negocio. Dejamos de hacer cosas que habíamos hecho durante décadas y nos centramos en aquellas actividades, como el I+D, donde podíamos generar y capturar un mayor valor. Este cambio de modelo supuso un reto para nosotros, ya que tuvimos que adquirir muchas competencias nuevas, tuvimos que aprender mucho y muy deprisa. Afortunadamente, hoy podemos decir que estamos por el buen camino. Desde entonces hemos multiplicado nuestra facturación por seis y tenemos una buena base de proyectos para el futuro. Para nosotros, es un privilegio y una responsabilidad ser parte de esta historia".