El conflicto catalán anima las ventas de cava aragonés
Eva Sereno
El conflicto catalán y el proceso de internacionalización animan las ventas de este producto, que en el mercado español ha registrado un crecimiento del 12% en el primer trimestre del año.
El cava de Aragón sigue ganando posiciones dentro del sector gracias principalmente al conflicto catalán y al proceso de internacionalización de las empresas productoras principalmente.
Unos factores a los que se suman las previsiones de crecimiento de consumo de este producto en España por primera vez en ocho años y tras una ligera caída del 0,8% en el ejercicio anterior. De momento, las previsiones son positivas para este año, ya que las ventas en el mercado interior han crecido hasta un 12% en el primer semestre de este año.
Meritxell Villas, directora de AragonMeGusta.com (a través de ella se comercializan cavas), ha explicado que los cavas aragoneses "están ganando cada vez más un mayor reconocimiento frente a los catalanes, que hasta hace unos años acaparaban toda la fama".
Una opinión que también es compartida por César Langa, de Bodegas Langa, una de las más activas de Aragón, quien afirma que la demanda a nivel nacional está creciendo por encima de la media a la que hace referencia el Consejo Regulador. "Nosotros en España estamos creciendo por encima del 1%, pero es fuera donde lo estamos haciendo de forma más significativa. Sin duda nuestro motor de crecimiento es la exportación".
Villas también ha añadido que la demanda de cavas aragoneses aumenta cada año y, en consecuencia, también la producción. "Todos los proveedores cuentan con que la campaña sea especialmente intensa, empujada por el mercado internacional y con ayuda del crecimiento nacional. En Bodegas Langa, por ejemplo, han producido unas 700.000 botellas y esperan superar con creces las ventas del año pasado".
En el mercado exterior, el cava español también ha experimentado una importante recuperación, creciendo un 2% en relación al mismo periodo del año pasado. En 2015 se produjeron en nuestro país más de 280 millones de botellas de cava. De ellas, una cuarta parte fue comprada por Alemania, que adquirió casi 40 millones de botellas, y Bélgica, con más de 32 millones de botellas, siendo los dos principales consumidores.
Además, también crece el mercado francés donde los cavas españoles compiten con el champagne, pero a un precio muy competitivo. Igualmente, se crece en Canadá, donde el consumo aumentó hasta llegar al 17%, y en Estados Unidos con el 14%, consolidándose este último como el cuarto mercado mundial para el cava.
En Aragón, por ejemplo, destaca la internacionalización de cavas aragoneses como el Reyes de Aragón, de Bodegas Langa, que exporta el 95% de la producción, sobre todo, a Europa, aunque también ganan peso mercados como el asiático y el americano.