Aragón

Urbaser invierte 6 millones de euros en un centro de I+D+i en Zaragoza



    El Centro de Innovación Tecnológica para el tratamiento de residuos "Alfonso Maíllo" (CIAM) tiene más de 2.000 metros cuadrados de superficie dedicadas a la investigación y desarrollo en este sector, siendo un centro único y pionero en Europa.

    El CIAM, puesto en marcha por Urbaser, la filial de medio ambiente y logística del grupo ACS, cuenta con unas instalaciones en Zaragoza en las que se han dispuesto los equipos más avanzados en este sector.

    El presidente de Urbaser, José María López Piñol, ha explicado que "la experiencia de Urbaser tanto en tratamiento de residuos como de servicios urbanos, junto con su compromiso con la innovación tecnológica, le ha llevado a dedicar gran esfuerzo al área de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i), con el objetivo de seguir distinguiéndose por el nivel tecnológico de sus soluciones, así como por su contribución a la sostenibilidad urbana".

    López Piñol también ha indicado que "confiamos en que el CIAM sea una plataforma ejemplar que permita a los investigadores y a las empresas cubrir el hueco existente entre la investigación y la puesta en mercado, consiguiendo una explotación real de los resultados. Esto debe generar nuevos negocios, empleo y hacer más competitivas las tecnologías nacionales en este sector. En definitiva, lograr economías más sostenibles".

    En concreto, el CIAM dispone de un área de procesos que funciona desde hace varios años con una inversión de 4 millones de euros y un edificio, inaugurado hoy, que ha supuesto una inversión de 2 millones de euros, sumando en total 6 millones de euros.

    Las instalaciones se distribuyen en un laboratorio especializado en residuos, aula ambiental polivalente, bancos de pruebas y administración, estando certificadas para sus actividades de I+D según la norma UNE 166.002 de Gestión de la I+D+i.

    Desde estas instalaciones se llevarán a cabo varias líneas de investigación centradas en la producción de energía eléctrica a partir del proceso de digestión anaerobia de los residuos, generando biogás a partir de la materia orgánica, así como sobre la eliminación de los olores en las plantas de tratamiento y de los vertidos líquidos que se producen.

    Otras líneas de trabajo son la valorización de residuos plásticos polietilénicos mediante su conversión en diésel, contando el centro con una planta semiindustrial para investigar esta vía de generación de combustibles; la producción de materias primas secundarias para procesos industriales; la producción de Combustible Sólido Recuperado (CSR) y sobre el proceso de compostaje y biosecado que genera el compost centrándose en la optimización de la tecnología propia y en la eficiencia energética.

    El objetivo con estas líneas de trabajo, según han indicado desde Urbaser, es mejorar el tratamiento de los residuos urbanos y optimizar los procesos para  lo que se están investigando y desarrollando distintos tipos de pretratamiento como el Tubo de Fermentación Rotativo (TFR).

    Además, la apuesta de Urbaser es que todos los residuos sean tratados para recuperar material y energía, superando la normativa europea en materia ambienta -que tiende al residuo cero-, tratando de conseguir al mismo tiempo minimizar los residuos que se envían a vertedero, que tienen un valor casi nulo, para transformarlos en un recurso de valor para otros productos y procesos.

    La inauguración ha contado con la participación del Consejero de Urbanismo e Infraestructuras del Ayuntamiento de Zaragoza, Carlos Pérez Anadón; la Subdirectora General de Colaboración Público-Privada del Ministerio de Economía y Competitividad, María Ángeles Ferre, y el Rector de la Universidad de Zaragoza, Manuel López.

    Convenio para tratar lodos

    Ayuntamiento de Zaragoza y Urbaser intensificarán la investigación en este campo con la firma de un nuevo convenio. El consistorio ya firmó en diciembre del año 2013 un convenio de colaboración con la compañía, empresa que gestiona el Centro de Tratamiento de Residuos de Zaragoza (CTRUZ), conocido también como Ecovertedero, dentro de la UTE Ebro y por el que se instaló en Zaragoza su Centro de Innovación Tecnológica de Residuos.

    Una colaboración que ahora se impulsa de nuevo, ya que la inauguración del nuevo edificio se ha aprovechado para firmar también otro convenio entre el Ayuntamiento y SOCAMEX (Grupo Urbaser) para la realización de un proyecto de investigación a partir de los lodos procedentes de la depuradora de La Cartuja.

    El tratamiento actual de los fangos generados consiste en una deshidratación mediante centrífugas, consiguiendo una reducción del volumen hasta las 15.000 toneladas aproximadamente, y una incineración posterior, obteniendo como producto final unas cenizas, que se envían a vertedero controlado. La producción de cenizas ronda las 4.300 toneladas anuales. Como consecuencia de la incineración de los fangos actualmente se generan, mediante una turbina de vapor accionada por los gases de combustión, 2.750.000 Kwh anuales, lo cual supone alrededor del 10, 5% de las necesidades eléctricas totales de la planta anualmente.

    Con este nuevo acuerdo, el objetivo es hacer una serie de pruebas experimentales (en laboratorio y en reactor piloto) de digestión anaerobia en vía seca de los lodos procedentes de la depuradora de la Cartuja (Zaragoza), en comparación con un sistema que pudiera ser equivalente en resultados (hidrólisis térmica + digestión convencional).

    De esta modo, está previsto que en una primera etapa, SOCAMEX estudie el potencial de producción de metano mediante la realización de ensayos de laboratorio BMP (Biochemical Methane Potential), con distintas relaciones de fango primario y fango secundario para la determinación de una serie de características del sustrato. El sustrato que será utilizado en los ensayos BMP será fango primario o secundario procedente de la EDAR de la Cartuja (Zaragoza).

    En una segunda etapa SOCAMEX llevará a cabo la operación en vía seca en un digestor piloto ubicado en el Centro de Innovación Tecnológica para el tratamiento de los residuos "Alfonso Maíllo" con los lodos de la EDAR de la Cartuja y teniendo en cuenta los resultados obtenidos en los ensayos de BMP.