Aragón

Crece el 10,5% la facturación de las franquicias aragonesas



    La Comunidad cuenta con un total de 23 cadenas que facturaron en 2014 un total de 424 millones de euros. La franquicia se perfila como una de las fórmulas más elegidas para los emprendedores, siendo las del sector servicios y las de hostelería y restauración las que mejores perspectivas presentan. Además, es una vía que permite a las empresas expandirse más fácilmente, aunque todavía las empresas aragonesas no tienen en cuenta suficientemente esta posibilidad de crecimiento nacional e internacional.

    El año 2014 ha sido bueno para el sector de la franquicia en Aragón. El ejercicio se cerró con una facturación de 424 millones de euros, lo que supone un aumento del 10,5% en comparación con el año anterior.

    Además, el sector no solo ha crecido en ventas, sino también en número de centrales y en puestos de trabajo generados. En concreto, en Aragón, se ha pasado en el último año de tener 21 operadores a 23 en total, lo que refleja un aumento del 9,5%. Estas centrales cuentan con 1.650 puntos de venta, produciéndose un crecimiento del 34% en el número de negocios en comparación con el año 2013.

    En materia de empleo, los datos también han sido positivos, experimentándose un incremento del 18% hasta alcanzar las 5.300 personas empleadas en este tipo de empresas.

    Aragón ha seguido en 2014 la tendencia de crecimiento que se ha producido en España en este sector, aunque la presencia de la franquicia dentro de la comunidad autónoma es muy desigual.

    Según los datos de MundoFranquicia Consulting, facilitados a elEconomista.es, la mayoría de las centrales se concentran en Zaragoza, que suma un total de 21, mientras que dos están en Huesca. Por su parte, en Teruel, no hay presencia de este tipo de establecimientos. La mayor red de ventas, entre los establecimientos propios y franquiciados, igualmente se concentra en Zaragoza con 1.609 puntos, de los que 201 son propios y 1.408 franquiciados.

    Sin embargo, a pesar de la favorable evolución del sector de la franquicia en la comunidad aragonesa, lo cierto es que Aragón "podría tener más empresas en desarrollo de franquicias. Muchas empresas podrían iniciar su experiencia nacional e internacional", según ha explicado Mariano Alonso, director general de MundoFranquicia Consulting a elEconomista.es, quien señala que están trabajando con el Instituto Aragonés de Fomento (IAF) para asesorar y ayudar a las empresas a que den este paso y en difundir las ventajas que tiene la franquicia.

    Un modelo que permite que una empresa pueda crecer más rápido y de forma más económica porque las inversiones las hace el franquiciado y la estructura de personal no es de la compañía. Además, permite tener presencia en diferentes puntos dispares del mercado y en cualquier parte de forma rápida.

    El pequeño crecimiento en el número de centrales en Aragón contrasta con el importante aumento en el número de puntos de venta o negocios que se abren como franquicias. Una situación "que sin duda está relacionada con el emprendimiento. La franquicia crece porque es una forma menos arriesgada que crear un negocio independiente a título individual, ya que se cuenta con una marca, unos conocimientos técnicos, asistencia...".

    Y la previsión es que siga aumentando el número de puntos de venta de las franquicias porque "muchas personas están optando por emprender y por crearse su empleo". Un escenario en el que también ayuda la aparición de franquicias de bajo coste o low cost y ventajas que se pueden dar para su financiación.

    Las franquicias que mejor evolución están teniendo o que presentan mejores perspectivas, siendo también de las más demandadas por los emprendedores, son todas aquellas relacionadas con el sector servicios "porque no requieren inversiones elevadas ni una plantilla grande". Además, también están en auge las franquicias de hostelería y restauración.

    El perfil de emprendedores que opta por abrir una franquicia también ha cambiado con el paso del tiempo, siendo ahora personas que tienen una mayor cualificación y más capacidades y habilidades de gestión, lo que también está redundando en reducir la mortalidad de estos negocios.