Ibercaja obtiene un beneficio de 356 millones
El resultado operativo bancario ha crecido casi un 9% interanual y el índice de mora del Grupo Ibercaja se sitúa en el 10,86%, casi un 17% por debajo del sistema. Las provisiones constituidas alcanzan el 56% de los saldos dudosos y la disponibilidad de activos líquidos representa el 20% del balance. En este período, la formalización de crédito se ha reactivado y casi el 60% se ha destinado a pymes.
Grupo Ibercaja ha obtenido un beneficio neto de 356 millones de euros hasta el mes de septiembre, mientras que el beneficio antes de impuestos es de 498 millones de euros. En este período, la labor comercial de la entidad se ha centrado en la captación de clientes y en la mejora de su vinculación, sobre todo de pymes y particulares, lo que ha favorecido un crecimiento de los recursos de la red minorista hasta los 48.116 millones de euros, un 4,74% más que hace un año.
Además, la cuota de mercado de Ibercaja se ha elevado 5 puntos básicos en doce meses y los recursos en balance se han incrementado un 1,39%, mientras que los de fuera de balance, fondos de inversión, planes de pensiones y seguros de vida han aumentado un 11,84%.
En este período también han crecido las aportaciones a los fondos de inversión de la entidad a raíz del entorno de bajos tipos de interés y de la búsqueda de mayor rentabilidad para los ahorros de clientes. Un contexto en el que el patrimonio gestionado en estos productos se ha incrementado un 23,56% interanual. Los planes de pensiones también han registrado una buena evolución con una variación del 9,84% desde septiembre de 2013.
Por su parte, la cartera crediticia se ha elevado a 36.625 millones de euros. La contracción en un año, 6,27%, se enmarca dentro del desapalancamiento del sector privado y la reducción de la exposición a promoción inmobiliaria. No obstante, el descenso de la inversión crediticia en Ibercaja ha sido inferior al del sistema, mejorando la entidad su cuota de participación en el mercado nacional.
Aislando la ralentización estacional que se produce en el tercer trimestre, el ritmo de formalizaciones de crédito muestra señales positivas. En los nueve primeros meses del año el volumen de formalizaciones suma 1.987 millones. Cabe destacar que casi un 60% de la nueva producción se ha destinado a la financiación de pequeñas y medianas empresas no inmobiliarias.
En este período, el margen de intereses suma 533 millones de euros. A perímetro homogéneo cede un 3,74%, como consecuencia de la contracción de la cartera crediticia y el efecto de unos tipos de interés extremadamente reducidos, mitigado en parte por la mejora de los costes de financiación. En el tercer trimestre se observa una recuperación del margen, con avances del 3,36% y del 5,47% sobre igual trimestre de 2013 y segundo de 2014 respectivamente.
Las comisiones netas totalizan 231 millones, 13 millones más que a septiembre de 2013 por la contribución de los productos de intermediación, cuya aportación crece un 16,19% a raíz del incremento del patrimonio gestionado en fondos de inversión y planes de pensiones.
Los gastos de explotación bajan un 3,20% por la optimización de costes y captura de sinergias en el marco de la integración de Caja3. El descenso es aún mayor, 5,78%, si se aísla el efecto extraordinario del Expediente de Regulación de Empleo al que podrán acogerse voluntariamente hasta 375 empleados, con un coste de 32,5 millones. La reducción de los costes recurrentes se mantendrá en los próximos meses, por la consecución de sinergias tras la integración de Caja3 y la racionalización de la plantilla y red de oficinas, según explican desde la entidad.
El resultado operativo bancario que incluye los ingresos típicos de la actividad y los costes recurrentes se eleva a 272 millones, un 8,85% más que hace un año a perímetro constante.
La gestión activa de la cartera de renta fija ha permitido aprovechar en este ejercicio las oportunidades del mercado, materializándose unos ingresos por resultados de operaciones financieras de 436 millones.
Las provisiones para insolvencias y otros saneamientos han ascendido a 157 millones, se sitúan en términos inferiores a los del pasado ejercicio cuando se afrontaron dotaciones extraordinarias muy elevadas derivadas de la adquisición de Caja3 y de la aplicación de los nuevos criterios sobre refinanciaciones.
Morosidad
La ratio de morosidad del Grupo se sitúa en el 10,86%, siendo un 17% inferior a la del sistema. La totalidad del incremento del índice de mora en el año se debe al descenso del crédito, ya que los saldos dudosos disminuyen desde diciembre. Sin tener en cuenta la actividad inmobiliaria, la mora se reduce hasta el 6,28%. El grado de cobertura total sobre los riesgos dudosos llega casi al 56%.
En el marco del "comprehensive assessment", el análisis de la calidad de los activos (AQR) llevado a cabo por el Banco Central Europeo ha puesto de manifiesto la calidad de la cartera crediticia de Ibercaja, el alto nivel de provisiones alcanzado para cubrir los activos de mayor riesgo y los rigurosos criterios de clasificación de los activos e identificación de los riesgos. Como consecuencia del ejercicio, las necesidades adicionales de dotaciones son de 7 millones de euros, el 0,05% del importe total de las carteras seleccionadas. Esto se traduce en un ajuste de la ratio de capital inicial de únicamente 2 puntos básicos, frente a la media española de 14 puntos básicos.
La venta de inmuebles del Grupo y de terceros se ha acelerado considerablemente a lo largo del año. Al finalizar septiembre el número de unidades vendidas se incrementa más de un 40% respecto a igual fecha de 2013.
Liquidez
La disponibilidad de activos líquidos es 12.591 millones, lo que supone en torno al 20% del balance. Adicionalmente, la capacidad de emisión de cédulas hipotecarias y territoriales es de 6.318 millones.
Al finalizar septiembre la ratio Common Equity Tier I se eleva al 10,36% de los activos ponderados por riesgo, con un aumento de 29 p.b. en el año.
En el test de estrés realizado por el BCE y la EBA, Ibercaja obtiene en los dos escenarios una ratio de capital que supera en más de dos puntos porcentuales los requerimientos mínimos, siendo el exceso de recursos propios en ambos supuestos superior a 600 millones de euros. En el escenario adverso, que refleja un entorno macroeconómico negativo y un endurecimiento de las condiciones de mercado, el Grupo contaría con un CET 1 del 7,88%, un 40% más que el umbral establecido.