Aragón
Las tarjetas de crédito pasan a la dieta alimentaria: cada persona se come una a la semana
Eva Sereno
Zaragoza,
Cada persona consume alrededor de 2.000 pequeñas piezas de plástico a la semana, lo que supone comer unos 21 gramos al mes. Es decir, en torno a unos 250 gramos al año. Unas cantidades que equivalen a comerse una tarjeta de crédito a la semana.
El problema de los plásticos y de los microplásticos no solo es un problema que debe entenderse como medioambiental en su sentido más estricto. También lo es de salud. Un último informe 'Naturaleza sin plástico: evaluación de la ingestión humana de plásticos presentes en la naturaleza', que ha sido elaborado por Dalberg Advisors, basado en un estudio solicitado por WWF y realizado por la Universidad de Newcastle, ha puesto de manifiesto que las personas consumen cerca de 2.000 pequeñas piezas de plástico cada semana.
Esta cantidad hace que cada persona ingiera unos 21 gramos de plásticos al mes y poco más de 250 gramos al año. Son cifras que son equivalentes a, por ejemplo, comerse una tarjeta de crédito a la semana.
El estudio alerta así de esta ingesta, además de indicar que los efectos específicos de la ingestión de los microplásticos en la salud humana no son todavía conocidos con exactitud, aunque sí hay informes que constatan que existe una relación con enfermedades o la infertilidad.
Esta situación se ha puesto de manifiesto en la presentación del Observatorio de Salud y Medioambiente DKV Seguros y ECODES, "Contaminación por plásticos. Uno de los mayores desafíos ambientales del siglo XXI", que se ha presentado en la sede de la compañía en Zaragoza.
El informe alerta de la más que preocupante situación de la contaminación por plástico, que es uno de los principales problemas medioambientales hoy en día. Y no es para menos porque, de media, alrededor de ocho millones de toneladas de plástico se vierten cada año a los océanos y que son canalizados por las corrientes marinas, formando concentraciones o islas de plásticos de grandes dimensiones
Estos ocho toneladas de plástico equivalen a vaciar un camión de basura lleno de plásticos cada minuto, al peso de 800 veces la Torre Eiffel, o a lo que pesan 14.285 aviones Airbus A380. Además, ocupan el equivalente de 34 veces la isla de Manhattan, según datos de Greenpeace.
De seguir esta tendencia, se estima que en el año 2025, los océanos tendrán una tonelada de plástico por cada tres de pesado y que, en el horizonte de 2050, habrá más plásticos que peces.
La contaminación por microplásticos también es terrestre, calculándose que es de cuatro a 23 veces más alta que la marina. Un de ejemplo de esto es la contaminación que causan las fibras textiles, al ser retenidas en los lodos de las aguas residuales que, además se utilizan frecuentemente como fertilizantes. Esto se traduce en toneladas de microplásticos depositadas en los suelos. Además, los microplásticos entran en los seres vivos a través del aire que se respiera y por los alimentos y las bebidas que se toman.
Soluciones
Son cifras ante las que se requiere poner solución y trabajar para convertir al plástico en un aliado en lugar de concebirlo solo como el causante de los mayores problemas medioambientales.
Un cambio que no es fácil porque la demanda de materia prima de plástico ha aumentado, al igual que su producción, que ha crecido en dos millones de toneladas en 1950 a alrededor de 400 millones de toneladas en 2018. Una cifra que equivale a 13 millones de camiones tráileres-cisterna de 30 toneladas. Además, se prevé la demanda crezca de forma continuada, llegando a superar los 1.000 millones de toneladas en 2050.
"En este informe del Observatorio de Salud y Medio Ambiente se ve que los estudios confirman la magnitud del problema y nadie puede ponerlo en duda. Ahora es tiempo de actuar y de hacerlo implicando a todas las partes y con una voluntad pública compartida", ha manifestado Josep Santacreu, consejero delegado DKV.
El informe también recoge diversas iniciativas que, tanto empresas como organizaciones, están realizando para recolectar y poner en valor los desechos de plástico de nuestros mares y océanos como el gran proyecto que pretende limpiar en cinco años el 50% de la isla de basura del Pacífico.
Igualmente se incide en otras medidas y sugerencias, planteadas por expertos, orientadas a proteger el medio ambiente y reducir el consumo de plástico, dirigidas tanto a industrias como a gobiernos y, también, algunas medidas a nivel individual que todas las personas pueden aplicar en el día a día.