Las elecciones andaluzas, más cerca que nunca del adelanto
José Luis Losa
Susana Díaz podría adelantar los comicios a otoño, que pillaría al PP con las heridas aún abiertas tras sus Primarias y a Podemos e IU en plena batalla entre la dirección regional y nacional
La actual legislatura andaluza tiene los días contados. Oficialmente, las elecciones deberían tener lugar, como muy tarde, en marzo de 2019. Sin embargo, pocos son los dirigentes políticos andaluces que no barajen ya el otoño como fecha para un posible adelante electoral.
En el entorno de la propia presidenta andaluza, Susana Díaz, que lleva meses negando esa posibilidad, empiezan a señalar que se trataría simplemente de un "adelanto técnico" más que político.
Muchos son los argumentos que baraja la presidenta andaluza, que tiene claro que quiere una convocatoria separada de las elecciones Generales, aunque es precisamente la inestabilidad del nuevo Gobierno socialista de Pedro Sánchez el que le va a dar los mayores quebraderos de cabeza para evitar esa coincidencia.
Uno de los motivos oficiosos por los que el PSOE-A quiere adelantar los comicios es para separarlos de la nueva cita con las urnas prevista para el 26 de mayo -elecciones municipales y europeas-, y evitar así que una posible negociación de Gobierno o de Investidura cercana a esa fecha le tenga bloqueada como ocurrió hace cuatro años, cuando tuvo que esperar 80 días hasta tomar posesión como presidenta.
Sin embargo, son otras claves políticas las que hace prever el adelanto electoral. Entre ellas, los buenos resultados que le dan en estos momentos las encuestas a los socialistas, con el viento de cola que ha traído la moción de censura a Mariano Rajoy, y el temor a que ese mismo viento cambie en unos meses si se constata la imposibilidad de Pedro Sánchez, con sólo 84 diputados en el Congreso, de atender las peticiones de Andalucía frente a las exigencias de nacionalistas y populistas.
Y es que en esta ocasión, el tablero político nacional va a jugar un papel muy relevante en las elecciones andaluzas, que se van a convertir en el primer test tras los enormes movimientos políticos que se ha producido en el último mes en todos los partidos.
Así lo ha visto Ciudadanos, que ha decidido adelantar sus Primarias a este mes de julio para evitar que un previsible adelanto electoral le pillara "sin los deberes hechos". Su líder durante estos cuatro años, Juan Marín, repetirá como candidato tras ganar la elecciones telemáticas que ha realizado el partido naranja entre sus afiliados. Y para presentar los resultados acudieron a Sevilla buena parte de la plana mayor de Ciudadanos, incluido Albert Rivera e Inés Arrimadas, quienes no sólo arroparon a Marín en el acto sino que advirtieron que van estar muy presentes toda la campaña.
Más complicado lo tiene el líder de la oposición, Juanma Moreno, quien tras el proceso de Primarias para suceder a Mariano Rajoy ha salido debilitado en el peor momento posible, a apenas unos meses de las elecciones andaluzas. Moreno pidió inicialmente neutralidad al PP andaluz, pero finalmente se señaló claramente a favor de Soraya Sáenz de Santamaría. La euforia tras la victoria de la expresidenta del Gobierno en la primera fase de las Primarias le llevó a hacer campaña activa como sorayo. Sin embargo, la victoria de Pablo Casado, que apenas tuvo respaldo entre la militancia en Andalucía, ha resucitado a casi todos los adversarios internos que Juanma Moreno había conseguido apartar y que ahora, aupados por la candidatura de María Dolores de Cospedal, reclaman su espacio. Entre ellos figuran Esperanza Oña, Juan Ignacio Zoido o José Antonio Nieto.
El nuevo presidente del PP, Pablo Casado, no ha tardado en confirmar a Moreno Bonilla como candidato, pero le obligará a cambiar su estrategia y a negociar con sus adversarios internos las listas electorales. De momento, decidió que el acto de apoyo al líder andaluz este pasado sábado no se celebrará en Málaga o Sevilla -donde ganó Sáez de Santamaría- sino en Córdoba, donde obtuvo mayor respaldo Cospedal y de donde es José Antonio Nieto, exalcalde de la capital y posible relevo de Moreno Bonilla en caso de un mal resultado en las elecciones autonómicas, en las que se jugará su futuro.
Rebelión en Podemos Andalucía
Los líderes andaluces de Podemos e IULV-CA, Teresa Rodríguez y Antonio Maíllo, presentaron este pasado viernes en Sevilla la marca "Adelante Andalucía" para la confluencia en esta comunidad autónoma, un paso que dan a pesar de la negativa del secretario de Organización del partido morado, Pablo Echenique, a aceptar dicho nombre para los comicios andaluces.
El dirigente estatal argumenta que la marca que impulsan desde Andalucía no lleva la palabra Podemos en un lugar preferente, como marcan los estatutos. Sin embargo, Teresa Rodríguez, que ganó las Primarias celebradas hace un mes en Podemos Andalucía con un 75% de los votos frente a la candidatura impulsada por Echenique y Pablo Iglesias, asegura que esas elecciones han legitimado la hoja de ruta marcada, que pasa no sólo por la confluencia con IU y otras formaciones de izquierda sino por el control de las cuentas del partido en Andalucía.
La líder de Podemos en Andalucía, perteneciente a la corriente Anticapitalista, ha criticado constantemente el excesivo centralismo al que Iglesias quiere someter al partido, mientras que desde la dirección de la formación morada acusan a Rodríguez de querer dividirlo.