Andalucía

Hojiblanca ultima su entrada en el sector del vino aliándose con cooperativas de Castilla-La Mancha



    El mayor productor mundial de aceite de oliva virgen ha obtenido recientemente un crédito de 30 millones de Cajamar para consolidar y diversificar su negocio. El objetivo último de Hojiblanca, tras intentos fallidos de unirse a Covap y Agrosevilla, y de hacerse con SOS (hoy Deóleo), es configurar una gran cooperativa multisectorial que pivote sobre el aceite de oliva, el vinagre, el vino y las aceitunas de mesa.

    Hojiblanca, cooperativa malagueña de segundo grado, no deja de crecer y parece haber decidido que mejor hacerlo en tiempos de crisis. El grupo que dirige Antonio Luque está ultimando su diversificación hacia el sector del vino a través de una alianza u operación corporativa con empresas del sector en Castilla-La Mancha. Hojiblanca ya cuenta con algunos cooperativistas asociados que producen vino en las localidades de Mollina, Aguilar de la Frontera o Lucena, todos ellos en Córdoba.

    Esta nueva vía de crecimiento, que elEconomista ha conocido de fuentes cercanas a la compañía, está respaldada por el crédito de 30 millones otorgado a la empresa por Cajamar, la primera caja rural de España cuya sede está en Almería. Este préstamo, anunciado por el consejero de Economía Antonio Ávila, cuenta con unas condiciones preferentes al haberse acogido a líneas de ayudas en vigor por parte de la propia Junta.

    Quiere ser un gran cooperativa multisectorial

    El objetivo último de Hojiblanca, tras intentos fallidos de unirse a Covap y Agrosevilla, y de hacerse con SOS (hoy Deóleo), es configurar una gran cooperativa multisectorial que pivote sobre el aceite de oliva, el vinagre, el vino y las aceitunas de mesa.

    Justamente en este último segmento es donde ha protagonizado la última de las operaciones corporativas, al adquirir precisamente a Deóleo su planta de envasado y comercialización de aceituna de mesa Acyco en Sevilla por trece millones el pasado julio. Meses antes se había hecho con las instalaciones de envasado de aceite de la quebrada compañía aceitera jiennense Fedeoliva, que estaban en manos de la Junta.

    El grupo andaluz registró en 2010 un récord histórico de facturación, alcanzando los 451 millones de euros (un 32 por ciento más) y sumó otros 20 mercados exteriores a su lista de exportaciones. Hojiblanca vende ya en 60 países. Este año, no obstante, prevé que sus ingresos disminuyan por la menor cosecha estimada de aceite.